Esta mañana he leído un reportaje en uno de tantos blogs que sigo (sin querer he perdido la reseña), sobre dar segundas oportunidades a los muebles. En muchas ocasiones acabamos deshaciéndonos de bellos tesoros porque sencillamente no sabemos cómo revivirlos, nos da miedo estropearlos, o nos falta tiempo para experimentar, a mí me ocurren las tres cosas a la vez.
Pero de esto ya hemos hablado con anterioridad, lo que he encontrado hoy es mucha inspiración en la firma 31andchange.com. Esta empresa con sede en Brooklyn, realiza cada pieza a mano en madera de bosques estadounidenses y cada una es única, ya sea por la veta de la madera, por el color o por la combinación de materiales. Muestra de ello son las mesas y auxiliares, «customizados» al gusto.
Y un claro ejemplo de que segundas oportunidades SI son buenas, lo podéis ver en estas sillas, todas diferentes y con gran personalidad, una capa de pintura y un gran listón de madera, han sido suficientes para transformarlas en un banco perfecto para el jardín, para el recibidor, o incluso el comedor, por qué no!.