Tenía planeado otro post para hoy, espero poder publicarlo mañana como el último del año.
Como habréis visto esta semana no me ha dado tiempo a publicar nada, ¡¡me río de las vacaciones!!. Supongo que los que sois padres como yo, sabéis que pedirse unos días libres en Navidad para estar con tus hijos, supone que los días se convierten en auténticos rallyes con tal de tenerles entretenidos y tu tiempo se convierte íntegramente en suyo. Hoy es la primera tarde que me he negado a pisar la calle, estoy literalmente agotada. Para más inri, si además le das vacaciones a la asistenta y tú marido no tiene ningún día libre, entonces hablamos de hacer malabarismos para no morir en el intento. A lo mejor puedo descansar el lunes cuando llegue a la oficina.
Hoy traigo los papeles pintados de pared de Aimèe Wilder, un toque divertido para ambientes desenfadados. Confieso que no me atrevería a usarlos yo misma, probablemente me cansaría, pero me resultan muy atractivos. Utilizados de manera inteligente, en pequeñas dosis decorando quizás una sola pared, o en una habitación infantil, imprimen un toque original y con mucha personalidad. Robots, ardillas, nubes y dibujos geométricos son símbolos de esta firma, donde además se pueden encontrar cojines, zapatillas, camisetas, bolsos y otros complementos con estos mismos motivos.
Una opción divertida para los más intrépidos.
Decofeelings 