Se acaba el año y me he pasado la última semana encerrada en casa con gripe, bueno no sólo yo, toda mi familia. Uno tras otro hemos ido cayendo como efecto dominó. De ahí mi ausencia en el blog. No hemos visto el sol ¡con lo que ha lucido!, no hemos salido a hacer ninguna actividad familiar, ni un mísero aperitivo, nada de nada. Espero que los virus se vayan con el 2016 y el 2017 nos traiga salud, no pido más.
Antes de decir adiós, quería traeros los 12 post más leídos según las estadísticas del blog, aunque no todos los escribí en 2016. Sin duda son las cocinas las reinas indiscutibles de vuestro interés.
Sin más os dejo con mi resumen anual. Os deseo todo lo mejor para el 2017 y os doy las gracias de nuevo por seguir ahí.
Desde hace tiempo letras y carteles inundan los espacios, tanto en viviendas como en locales y comercios, estoy segura que habréis visto o leído mil post al respecto. Lo cierto es que tienen la característica de ser muy decorativos, por sí solos, formando palabras o como textos completos.
Las primeras imágenes que vais a ver son de este tipo, por cierto que la número uno y dos están escogidas por algo («R» la inicial de mi marido y «C» la mía). Pero las hay de todo tipo, de madera, de hierro, realizadas a partir de cuerda, con alambre, incluso con el cable de un teléfono :-) Para mí las más impactantes son las lumínicas XXL, si me permitís una recomendación, visitad la web Letteroom porque adquiriendo una de sus preciosas letras estaréis colaborando también con la Fundación Aladina.
Otra razón me ha llevado a escribir este post y es que, de un tiempo a esta parte, me fijo mucho en las tipografías. El Photoshop como muchos otros programas tiene sus limitaciones, así que lo que de verdad me da cierta envidia es lo que llaman «Hand Lettering» (o escritura manual). La gente capaz de escribir esos preciosos textos, logotipos y demás con sus propias manos, no tiene precio. Al final del post veréis un vídeo a modo de tutorial supuestamente para principiantes aunque yo me he quedado tal cual, porque a priori me resulta harto complicado.
Imaginad la cantidad de utilidades que se le puede dar: hacer tus propias invitaciones de boda totalmente personalizadas, diseñar un logo chulo para tu empresa, ejercer de buen anfitrión en una comida poniendo los nombres de tus invitados en cada servicio,… y si eres un valiente y te atreves con la cerámica, puedes incluso personalizar tu vajilla (en Madrid existe una tienda donde te enseñan a hacer esto mismo, se llama Pinta en Copas, elijes entre sus más de 100 modelos de piezas y te explican cómo pintarla o escribir sobre ella). Os dejo imágenes también de lettering sobre cerámica.
Como veis las letras dan mucho más de sí que el mero hecho de colgar una en la pared. Yo me pongo como asignatura pendiente el «hand lettering», no sé si como curso o a ratos con tutoriales de Youtube, hay quien asegura que relaja un montón…