De oficina a acogedor piso…

Este es el piso de Álex Boisset, un viajero incansable, empresario y creador de contenido que ha recorrido el mundo en busca de olas, buen clima y experiencias únicas. Además de su pasión por el surf y la naturaleza, ha incursionado en el ámbito del diseño y la ecología. Lidera la marca B3TTER, enfocada en productos alimenticios saludables, y comparte su estilo de vida a través de redes sociales, donde habla sobre deporte, alimentación y sostenibilidad.

Cuando Álex Boisset aterriza en Barcelona, busca algo más que un simple lugar donde quedarse así que, junto al arquitecto Carles Margineda y la interiorista Anna Alegre, ha logrado transformar una antigua oficina abandonada en un refugio con alma, donde cada rincón cuenta una historia. Ubicada en la emblemática Via Laietana, esta vivienda de 72 metros cuadrados es una invitación a la luz, la amplitud y la autenticidad.

El alma viajera de Boisset se refleja en cada detalle. Tras recorrer el mundo en busca de olas, buen clima y experiencias inolvidables, regresaba siempre con la misma idea: encontrar un hogar que reflejara la esencia de Barcelona. Y después de seis meses de búsqueda, lo encontró. Un espacio en bruto, pero con un potencial enorme, que hoy es un testimonio de su estilo de vida y su amor por el diseño.

La reforma fue un reto emocionante. Lo primero fue derribar tabiques y abrir los espacios para dejar que la luz fluyera libremente. La distribución se reinventó para crear un salón-cocina amplio, una habitación que se abre y cierra con una majestuosa puerta corredera, una pequeña oficina y un baño curvo lleno de encanto.

El respeto por los elementos originales fue clave en el diseño. La volta catalana en el techo, las molduras clásicas y el suelo de madera natural combinado con baldosas hidráulicas rinden homenaje a la historia del edificio. Su propósito era conseguir que al entrar en la vivienda el estilo reflejara que se encontraba en la ciudad condal, además de que llevara su esencia, creo que lo consiguió con creces.

Álex no se limitó a supervisar: participó activamente en la reforma, poniendo en práctica las enseñanzas de carpintería que aprendió de su padre. Cada material, cada textura, fue escogida con mimo, priorizando lo natural y lo artesanal. La cocina, diseñada bajo el concepto de loft, cuenta con una espectacular isla de Silestone de Cosentino, lámparas de Liderlamp y un extractor a la vista que aporta un toque industrial.

En el baño, el verde menta aporta frescura y refuerza la conexión con la naturaleza. Las ventanas originales se restauraron para conservar el carácter del edificio, mientras que el mobiliario combina piezas funcionales y atemporales, como el sofá Martina en beige de Kave Home o la mesa de centro de The Masie.

El arte también juega un papel fundamental en la decoración. Las paredes están adornadas con obras de Enrich.R, un amigo del propietario, que añaden carácter y personalidad al espacio. Cada rincón refleja un pedazo de la vida de Boisset: desde los recuerdos de sus viajes hasta su pasión por el diseño y la ecología.

Se ha conseguido un hogar con identidad que habla tanto de su propietario como de Barcelona. Un reflejo de la vida de Álex, de sus experiencias y de la esencia de la ciudad.

¿No os parece un piso maravilloso?

Fotografía: Montse Garriga para la revista AD

[formulario_de_suscripción_al_blog]

mxTAD

El mundo está lleno de contrastes. Vengo de un fin de semana en Asturias donde la vegetación era tal, que en ciertos lugares donde el sol incidía de determinada manera el verde era tan potente, que parecía fosforito. Y ahora os traigo un paisaje casi desértico, en Méjico, que quizás no sea tan asombroso hablando de vegetación, pero al que, sin duda, no puedo dejar de sacarle sus encantos también.

Es un proyecto del estudio mxTAD, una vivienda construida para un diseñador gráfico. Observándola de frente vemos cómo la puerta principal separa la casa en dos. Y al abrir dicha puerta, el espacio discurre de manera abierta desde la entrada hasta el fondo de la casa, llegando a un patio interior cubierto de grava.

El terreno sobre el que está construido la casa, no era regular, pero se diseñó de tal manera para que desde fuera se observara una edificación completamente horizontal. Por dentro, los cerramientos de cristal, así como las ventanas (algunas de ellas con espacio para sentarse), toman una gran importancia. Los espacios se comunican entre sí a demanda como el salón, la cocina o el patio.

Para la sala de estar, el comedor y la cocina, se ha elegido la madera como protagonista, aunque en esta última se ha colocado un antepecho en color negro para proteger la zona de cocinar, que hace juego con la carpintería metálica de las ventanas. Posiblemente sea una sensación óptica mía a causa de las fotos, pero la mesa de comedor me resulta algo pequeña respecto a las grandes dimensiones del espacio, como si sus proporciones no fueran las correctas ¿no os da la misma sensación?

En casa de un diseñador no podía faltar un espacio para el trabajo, aquí se ha resuelto con una balda volada bajo una de las ventanas que dan al patio, lo que le otorga de mucha luz natural. Al ser un escritorio tan espacioso, permite que trabajen dos personas a la vez.

El dormitorio principal es muy relajante gracias a los tonos empleados, colores tierra, neutros y algún toque de negro. Además, goza de bonitas vistas gracias a una gran puerta corredera con salida al jardín, donde se ha colocado una pequeña zona de estar. Cuenta con su baño, una de las zonas que más me gustan de esta casa, con un tocador doble, espejos ovalados, azulejos rectangulares de corte tradicional (los podéis encontrar muy similares en Nais), un toque industrial en griferías y mobiliario, la combinación con la madera que hace de este baño un espacio muy cálido y por supuesto la iluminación, que siempre juega un papel muy importante en cualquier ambiente. He encontrado apliques iguales a los que hay a ambos lados de los espejos en The Masie.

Un segundo baño, sigue el mismo patrón que el baño principal, sólo que en este caso el lavabo sólo tiene un seno y se ha apostado por un gran armario para disponer de mucho almacenaje. Y todavía hay un tercero, con una pila volada, griferías encastradas en negro (al igual que el resto de la casa), pero esta vez en lugar de armario, nos encontramos con una estantería abierta donde lucen adornos de decoración, algunas revistas o pequeños cuadros.

Por último, la casa también cuenta con una gran habitación infantil basada en el método Montessori. Todo está al alcance de los niños, tanto la cuna/cama, las baldas para los libros, la cocinita para jugar, o las cajas con juguetes que directamente se apoyan en el suelo. Particularmente, me encanta la silla de loneta que parece de playa, pero en tamaño infantil. Ah! si os habéis dado cuenta, en esta habitación tampoco falta un espejo con forma circular asimétrico situado sobre la cama. Y al igual que las otras habitaciones, también tiene salida directa al jardín.

¿Qué opináis de esta casa? Es algo más moderna de lo que normalmente suelo traer. ¿Os gusta?

Imágenes: Amy Bello para Contemporist

Introduce tu correo electrónico para suscribirte a este blog y recibir avisos de nuevas entradas.