Galán Sobrini Arquitectos

Voy como «pollo sin cabeza». El viernes pasado por fin publiqué el anuncio de venta de mi chalet, a su vez fuimos a ver con las niñas el piso donde nos mudamos (ellas no lo habían visto). Estuve cogiendo medidas y ahora me paso los días intentando hacer un tetris con los muebles. Por otro lado, estamos regalando gran parte de nuestra biblioteca, ya sabéis que tenemos muchísimos libros, nuestros amigos están encantados (se los llevan por cajas), pero a mí me da cierta nostalgia. También he hecho limpia de ropa y menuda limpia, 5 bolsas han ido al contenedor de reciclaje y tengo tres montañas a la venta en Vinted con ropa prácticamente nueva, algunas prendas con etiqueta incluso. Mi marido también se ha deshecho de buena parte de la suya, a él le salieron 7 bolsas y aún tienen que hacer lo propio mis hijas. Tengo el síndrome del nido, intentando mantener todo limpio a todas horas, pero es realmente imposible con una mascota y dos adolescentes. Así es mi vida ahora y lo seguirá siendo hasta que nos mudemos, no sabéis las ganas que tengo de que llegue abril, aunque el cambio será otra locura igualmente. Pufff….

Por cierto, si alguien está pensando en mudarse a la zona norte de Madrid o quiere adquirir ropa en perfecto estado a precio de ganga, que me escriba por privado y os mando la información (por favor abstenerse los que sólo quieran cotillear, que no me sobra el tiempo). ¡Gracias! :-)

Ahora que busco pisos o casas pequeñas para coger inspiración, me sigo encontrando con casoplones preciosos que a mí me sirven de poco. Espero que os sean de utilidad a vosotros.

Esta casa está en Pozuelo, una de las zonas más caras de Madrid, tiene ni más ni menos que 300 metros cuadrados, una casita en el jardín y una parcela de 1.500 metros, ahí es nada. Los arquitectos Galán Sobrini la sometieron a una reforma integral con el fin de conseguir una vivienda abierta al jardín gracias a grandes ventanales, así como a espacios diáfanos. Le dieron gran protagonismo a la zona de día, cocina, salón y comedor están comunicados entre sí, y a su vez se abren a un gran salón de verano, aunque estas estancias también pueden cerrarse a demanda mediante grandes puertas correderas.

Desde la entrada ya se intuyen los espacios y la amplitud de la vivienda, acentuado por el blanco impoluto de las paredes. Color que predomina en toda la casa, aunque encontramos también neutros como el topo, el gris o el negro. Sólo en las habitaciones infantiles, así como en sus baños, se han permitido otras tonalidades (rosa para la niña y azul para los niños). Hablando de las habitaciones infantiles y esto es una opinión personal, no soy partidaria de utilizar camitas pequeñas ya que duran poco tiempo y la inversión a la larga es el doble, ya que habrá que cambiarlas cuando los niños crezcan. Me parece más interesante poner directamente la cama que vayan a utilizar hasta que sean mayores (ya sea cama nido, cama de 90 cm individual o litera, por ejemplo).

Los papeles pintados también tienen mucho protagonismo en esta casa, personalmente me encanta el que se ha utilizado en el baño principal, nada cansino, divertido y con un color que combina a la perfección con los complementos en negro, dorado o incluso, con el armario en gris. Me ha costado mucho buscar uno igual y el que encontrado no es del mismo color, pero sí el diseño, podéis verlo en la tienda Papeles Decorativos. Para la zona de mirador, unas clásicas rayas en tonos beige y tierras son un acierto seguro (podéis ver este casi igual en El Corte Inglés). Como también lo es el clásico tartán de la habitación infantil (he encontrado uno muy similar en Aribau Papeles Pintados).

Aunque los colores están muy definidos, no falta en ningún espacio toques cálidos como la madera, las fibras naturales, el cuero, o textiles en tonos tierra, restando de esta manera la frialdad del color blanco.

¿Qué os parece el casoplón de hoy?

Imágenes: Galán Sobrini

Introduce tu correo electrónico para suscribirte a este blog y recibir avisos de nuevas entradas.

RQHstudio

Cuántas veces hemos pensado que podríamos llevar a cabo la decoración de nuestra casa por nuestra cuenta para después, descubrir que nos quedamos por el camino, que las cosas no salen como queremos o que las ideas no nos terminan de encajar. Entonces es cuando, aún teniendo una casa habitable, siempre parece que nos falta un pasito más, algo que la convierta en hogar.

Eso mismo fue lo que les ocurrió a esta pareja de Logroño. Adquirieron un piso de unos 100 metros cuadrados en el centro de la ciudad al que le dieron un primer lavado de cara por su cuenta, pero al tiempo se percataron de que necesitaban la mano de un profesional para sacar todo el potencial y la personalidad que tenía. Para ello confiaron en Rober Quiñones-Her, del estudio de interiorismo RQH.

El interiorista encontró una casa donde predominaba el blanco en sus paredes, tenía un precioso suelo de roble de lamas anchas y una luz que lo inundaba todo (al estar en un sexto piso, sobre todo el salón y el dormitorio, disfrutaban de mucha luz natural), todas estas características hacían de esta vivienda un buen punto de partida para empezar a darle una nueva imagen. Necesitaban buscar el equilibrio entre los muebles que ya tenían los propietarios y otros nuevos de corte moderno, como así lo solicitaron ellos.

La carpintería también era un aspecto muy importante, la casa carecía de puertas, ya que no habían encontrado ninguna que se ajustara a sus gustos, sin embargo, ahora tras el paso de estudio RQH, es una de las cosas que más les gusta. Se hizo un estudio completo de iluminación, aprovechando los altos techos para añadir lámparas colgantes decorativas y otros puntos de luz estratégicamente colocados con lámparas de pie y de sobremesa. Ah! Sin olvidar el uso del color, gracias al lienzo en blanco como protagonista y al atrevimiento de los propietarios, se permitieron la licencia de incorporar elementos con toques de color, azules, rosas, mostazas, e incluso los verdes de las plantas, conviven a la perfección.

La entrada ya es una declaración de intenciones. En la puerta, realizada a medida por el estudio, ya se puede ver el tipo de carpintería que encontraremos en el interior. Se ha creado un armario bajo con una pequeña alacena que no ocupa mucho espacio visual ya que no llega hasta el techo y junto a él, se le ha dado textura y movimiento a la pared con un panelado realizado a base de arcilla (es una pieza del estudio de interiorismo). También sorprende la pequeña escultura de hierro que luce al otro lado del armario, la realizaron los propietarios.

Del recibidor se accede directamente al salón y aprovecha su luz natural. Lo primero que encontramos es el comedor, donde se han mezclado los muebles e iluminación nueva de esta zona, con el aparador que apoya contra la pared ya existente en la casa. También aquí, el estudio de interiorismo ha creado otra pieza exprofeso para los clientes. Sobre el aparador luce un gran tablero de madera revestido con papel pintado. Una solución que servía por un lado como elemento decorativo y por otro, era una manera de disimular la curvatura de dicha pared donde les era imposible colgar nada. Junto al segundo ventanal, se encuentra la zona de estar. De nuevo las paredes se llenan de detalles, revestimientos como las molduras o el diseño de palillería, las realzan y les aportan elegancia y dinamismo.

Uno de mis elementos favoritos de esta vivienda, quizás por la que hoy está en el blog, es la puerta de la cocina. Como ya os he contado en varias ocasiones, estoy algo cansada de los cerramientos en negro y cristal, éste con la perfilería metálica en color champán me parece todo un acierto (una tonalidad atemporal y de la que difícilmente te cansas). Si os fijáis está hecha con el mismo diseño que el resto de las puertas.

Los muebles de la cocina ya estaban en la casa, son en blanco neutro por lo que resultaban fácilmente combinables. La madera era la opción perfecta para darle un toque de calidez.

Finalmente llegamos al dormitorio principal. Se conservaron los armarios empotrados a los que simplemente se les cambiaron los tiradores. La cama y el cabecero ya lo tenían los propietarios, así que el interiorista decidió introducir más color a la estancia con la cómoda, las mesillas y algunos textiles. Particularmente me encanta el rincón donde se ha colocado una descalzadora con un espejo dorado sobre ella.

Del baño se conservó casi todo, sólo se cambió el armario por uno suspendido y de diseño minimalista, la grifería y el espejo, pero todo muy sencillo y atemporal.

Como veis, aunque muchas de las cosas ya las tenían los clientes, en la mayoría de los casos es un acierto total contactar un profesional para conseguir resultados como este y transformar una vivienda en hogar. ¿Qué os parece esta casa? ¿No es una maravilla?

Imágenes: rqhstudio

Introduce tu correo electrónico para suscribirte a este blog y recibir avisos de nuevas entradas.

Vuelta a la primavera…

«Aunque no esté escrito en ningún libro, hay un tipo de primavera que se llama Ibiza» Así comienza Susanna Cots explicando la filosofía de este proyecto. Y cierto es que si hablamos de las islas, rápidamente nos viene a la cabeza las eternas horas de sol, la playa, los chiringuitos y la vida bucólica, por mucho que sepamos que hay otra realidad, como en cualquier parte. Días de lluvia y frío, de monotonía, de trabajo, etc. Pero a mí, particularmente, me gusta más pensar en la lúdica.

Aunque no lo parezca esta casa viene de ser un lugar frío y oscuro. La apertura de ventanas y la construcción de pasillos acristalados fue determinante para dejar entrar la luz y toda la naturaleza que rodeaba la vivienda. Incluso un pequeño anexo a ella (la casa de invitados) se unió a la matriz a través de un pasillo de cristal.

Las simetrías juegan un papel importante, cocina, salón y cuarto de estar se alinean dando a la planta principal continuidad y los grandes cerramientos de cristal permiten comunicar el interior y el exterior a demanda. Elementos como la chimenea del salón, pueden ser utilizados también por su cara exterior, pudiendo disfrutar de ella por el porche exterior.

La entrada ya es una declaración de intenciones. Siempre me gustaron así, tan bellas que una simple mesa auxiliar redonda y un jarrón, son capaces de llenar todo un espacio. Pero no os equivoquéis, se necesita más que eso para que ésta se vea resultona, en este caso un suelo de madera colocado en espiga, una pared panelada (con el plus de la sorpresa del aseo en negro, efecto Wow total), una escalera con una iluminación muy estudiada… en fin, todo cuenta.

La cocina y el comedor ocupan un gran espacio alargado. Este último, se ha zonificado gracias al techo de vigas vistas en madera, a tono con el resto de los muebles y piezas en fibras naturales. La cocina además, posee una gran isla con zona de asientos para desayunos o comidas informales. Tras el comedor, encontramos una sala de estar con un gran televisor que, gracias a sus enormes ventanales, puede abrirse a demanda para comunicarse con el exterior, donde encontramos un banco de obra de estilo mediterráneo y una fuente. Además de los ventanales, su techo también es de cristal.

Al igual que la planta baja está concebida para el uso y disfrute en familia, la primera planta es todo lo contrario, se busca privacidad. El dormitorio principal ha copiado la idea del salón y su chimenea puede disfrutarse tanto desde la habitación como desde la ducha, doble confort. Cuenta además, con otros dos dormitorios que comparten baño completo. En esta planta, encontramos una habitación más que hace las veces de despacho y zona de juegos.

Y la guinda del pastel, en el jardín. Un maravilloso invernadero para sacar todo su potencial al exterior, incluso en invierno, porque aunque ya sabemos que en Ibiza siempre es primavera, también hace frío de vez en cuando ;-)

Imágenes: Susanna Cots

Introduce tu correo electrónico para suscribirte a este blog y recibir avisos de nuevas entradas.

BABELstudio

No tenía claro si dejar el post para mañana porque hoy es el cumpleaños de mi hija mayor, ¡19 ya! El tiempo pasa volando. Pero como estamos entre semana y las rutinas son lo que son, las celebraciones las dejamos para el fin de semana. Así que aquí estoy con mi dosis «deco» del jueves.

No sé si a vosotros os pasa lo mismo, hace tiempo que me cansé de los cerramientos de hierro y cristal, pero es algo que no me pasa con los de madera supongo que porque su peso visual no es el mismo. También os diré que cuando hablo de los de hierro, me refiero a los de perfilería negra, me resultan pesados. Estos de hierro se pueden lacar y hay tal variedad de tonalidades más amables como los topos, beige, colores pastel, azules,… ya la vez, distintos grosores más finos para poder elegir, que se me antojan más elegantes, discretos e incluso a veces, con formas curvas que llegan a ser muy originales (en esta carpeta de Pinterest podéis ver algunos ejemplos).

Todo esto viene justamente a lo que ha llamado mi atención en esta casa. Se trata de un proyecto de reforma integral en el casco viejo de Bilbao de BABELstudio . Como en la mayoría de los pisos antiguos, un largo pasillo distribuía los distintos espacios así se apostó por aprovechar todas las ventanas que daban al exterior, incluida una balconada en esquina (donde se situó la cocina) y dejar los baños y zona de servicio en la parte interior. Ahora, tanto el salón, el comedor, la cocina y los dos dormitorios, disponen de luz natural y gracias a los cerramientos de madera y cristal, se ha podido por un lado, independizar la cocina para tener un espacio cerrado pero integrado al salón a la vez y por otro, lleve luz al pasillo que había quedado en la zona oscura de la vivienda.

Bajo la carpintería divisoria, se ha aprovechado para realizar muebles a medida que sirven de almacenaje y llevan el mismo acabado lo que da continuidad. Al igual que las carpinterías de madera envejecida de las puertas, que tienen su réplica en el acabado del suelo.

Para conservar elementos del pasado, se dejó a la vista la viga que atraviesa el techo de la cocina y parte del pasillo, así como la pared de ladrillo de la zona del salón comedor. Recursos que potencian el carácter de la vivienda y que hace que no sea tan necesario invertir demasiado en decoración.

Si os fijáis, pocos muebles y muy sencillos. Algunas fácilmente reconocibles como la cama de Ikea, o la lámpara del salón (de la misma firma), las sillas CH24 Wishbone (quizás originales, aunque también pueden ser de imitación, a un precio mucho más económico) o la mesa, que la tenéis prácticamente igual en SKLUM, por poner algunos ejemplos. No hace falta mucho contenido cuando el continente habla por sí solo, eso sí, que nunca falte el toque verde de las plantas :-)

Imágenes: Biderbost Photo y BABELstudio

Introduce tu correo electrónico para suscribirte a este blog y recibir avisos de nuevas entradas.

Diseño vs funcionalidad…

Ahora ya sí, inmersa en mis rutinas, vuelvo a los posts con contenido de decoración. Me ha costado la mitad de septiembre coger el ritmo normal, eso me pasa por postponer tareas y dejar las cosas para el último momento. No suelo ser así, pero entre la pereza de las vacaciones y, sobre todo, el momento vital en el que me encuentro, sencillamente es lo que ha sucedido. Por suerte me he puesto las pilas al llegar y parece que mi actitud está cambiando, espero que este inicio de curso que está siendo productivo, pueda mantenerlo en el tiempo. De hecho, tengo pensado algunos cambios para esta temporada, cambios que aún he de darles forma, ideas que rondan mi cabeza para ofrecer mis servicios de decoración de una forma más rápida y democrática (como diría el gigante sueco), pero esto ya os lo contaré más adelante cuando tenga las ideas más «masticadas».

Cambiando de tema y respecto a la vivienda que hoy nos ocupa, andaba yo fascinada con este, cuanto menos, curioso piso, hasta que me he percatado que quizás no todo vale en cuanto a diseño y arquitectura se refiere. Precisamente lo que más había llamado mi atención, esas escultóricas escaleras en acero, en un precioso tono azul que destacan sobre un lienzo neutro, me ha hecho replantearme la seguridad de las mismas. Viendo las imágenes una y otra vez, me he dado cuenta de la altura de los peldaños, luego he pensado en personas como yo (que últimamente además de no ver ni castaña, pierdo el equilibrio y vivo más a ras del suelo que de pie). ¿Podéis imaginar una caída desde la escalera contra la base de la chimenea de cemento que se encuentra justo debajo? ¡Auchhhh! ¿Todo vale para conseguir un diseño bonito? Quizás una distancia menor entre los peldaños o mejor aún, un pasamanos, evitaría este problema ¿no?. Menos elegante, quizás…, más seguro, por supuesto.

Independientemente de este punto, que para mí sería un cambio sin duda, al resto del piso no le pongo ningún «pero». No es una casa convencional, se trata de la vivienda de un director de cine cuya intención era albergar a 10 o 12 personas para poder convivir a la vez que trabajar, a modo de «campamento creativo», una manera de tener a su gente reunida en todo momento para hacer reuniones, «brainstorming», presentaciones, etc.

Muchas de las cosas que aquí se hicieron fue pensando en esta idea precisamente. Una enorme mesa de comedor frente a la chimenea, y a la vuelta la cocina, múltiples sitios donde tumbarse y relajarse para compartir ideas, dormitorios convencionales, en literas o en altillos, puertas correderas que conectan exterior e interior, todo con el fin de que la comunicación fuera lo más fluida posible.

Todo el trabajo de construcción se realizó a distancia durante la pandemia, tras ella, sólo quedó determinar cómo amueblar y colocar los accesorios para que cada espacio pudiera ser aprovechado de la mejor manera posible. Así, encontramos muebles sencillos, muchos los reconozco de la firma Ikea, cestos y almacenaje dispuestos por toda la vivienda para mantener el orden (fundamental cuando convive tanta gente), por supuesto las notas de arte no pueden faltar en un espacio creativo y nada de saturar los ambientes, precisamente porque la comunicación ha de ser fluida.

¿Qué pensáis de esta vivienda / estudio? ¿Cambiaríais algo o la dejaríais tal cuál?

Fotografía: Matej Hakar / @matejhakar Para: Dwell

Introduce tu correo electrónico para suscribirte a este blog y recibir avisos de nuevas entradas.

 

El arte de mezclar estilos de diseño de interiores:

Cómo crear espacios auténticos y funcionales

El diseño de interiores no es simplemente un ejercicio estético; es un diálogo constante entre forma y función, pasado y presente, tradición y modernidad. Este diálogo crea hogares que son reflejos no sólo de tendencias, sino de las personas que los habitan. 

En el mundo del diseño de interiores, la mezcla de estilos no es sólo posible, sino que es una forma de traer profundidad y autenticidad a un espacio. A continuación, exploramos cómo puedes combinar diferentes estilos de diseño para crear un hogar único y funcional.

Descubriendo tu estilo personal

Antes de embarcarte en la aventura de mezclar estilos de diseño de interiores, es crucial realizar un ejercicio de autoconocimiento para entender tus propias preferencias y necesidades. Esto implica más que simplemente decidir si prefieres las líneas limpias del estilo moderno o la ornamentación del clásico. 

Se trata de identificar qué elementos te brindan comodidad y qué detalles contribuyen a la funcionalidad de tu espacio. Una vez que tienes claro lo que buscas, puedes utilizar diversas herramientas y técnicas para hacerlo realidad.

En este contexto, el bricolaje se convierte en un aliado valioso. Aunque muchas personas se sienten intimidadas ante la idea de manejar herramientas y materiales, lo cierto es que incluso con habilidades básicas y herramientas sencillas como una llave hexagonal, puedes abrirte puertas a una infinidad de proyectos personalizados. 

Estos proyectos no solo te permiten incorporar piezas únicas que reflejan tus gustos personales, sino que también te brindan la satisfacción de haber creado algo con tus propias manos, alineado con tus preferencias y necesidades.

Cómo combinar estilos con elegancia

Color como conector

Una forma de unificar estilos es mediante el uso de una paleta de colores. Imagina que tienes un salón con un sofá de estilo vintage y una mesa de centro minimalista. En este caso, una paleta de colores común puede servir como hilo conductor que armonice estos elementos.

Pero, ¿qué significa tener una paleta de colores común? No significa necesariamente que todos los elementos deban compartir exactamente el mismo color. En cambio, debe haber toques de colores comunes que conecten estos elementos, creando un espacio cohesivo y visualmente agradable.

Equilibrio y proporción

Aunque la mezcla de estilos puede parecer desordenada al principio, el equilibrio y la proporción son clave para que el diseño funcione. Puedes tener un mueble grande de estilo industrial, pero equilibrarlo con detalles más delicados o accesorios de estilo boho-chic. El equilibrio también se logra a través de la distribución del espacio y la forma en que las piezas interactúan entre sí.

Textura y patrón

La textura y el patrón son otros elementos que pueden ayudar a mezclar estilos de forma efectiva. Una alfombra de estilo oriental podría añadir un elemento inesperado a un espacio contemporáneo, mientras que un cojín con estampado geométrico podría darle un toque moderno a un sofá de estilo más clásico.

La funcionalidad no debe comprometerse

Un aspecto que no debe pasarse por alto a la hora de diseñar una casa es la funcionalidad del espacio. Independientemente del estilo o la combinación de estilos que elijas, el diseño debe satisfacer las necesidades de tu hogar.

Por ejemplo, si tienes niños o mascotas, un estilo que priorice la durabilidad y la facilidad de limpieza puede ser más adecuado para ti. Imagina lo cómodo que sería disponer de muebles y materiales capaces de soportar el inevitable desgaste de un hogar activo.

Del mismo modo, si trabajas desde casa, resulta crucial considerar un diseño que facilite un entorno de trabajo productivo. Una distribución bien pensada, amplias soluciones de almacenamiento y una iluminación adecuada pueden contribuir en gran medida a hacer de tu oficina en casa un espacio en el que prosperen la concentración y la creatividad. 

Cuando imagines tu espacio de trabajo ideal dentro de casa, piensa en cómo puedes incorporar elementos que te inspiren concentración y te ayuden a mantener la motivación a lo largo del día.

Introduce tu correo electrónico para suscribirte a este blog y recibir avisos de nuevas entradas.

Casa Lorena

Cuento los días para irme de vacaciones, ya queda menos. Me gustaría poder quedarme la semana que viene en el pueblo, pero aún me quedan cosas que hacer por aquí y es que, aunque a mí no me vaya la vida en esperar una semana más, realmente estoy sufriendo por mi perrita. Me pregunto, si yo que vivo en un pueblo a las afueras de Madrid y rodeada de campo, veo lo mal que lo pasa Titi con estos calores, ¿cómo sobreviven los pobres perros que viven en la ciudad? No quiero imaginar sus pezuñas tocando el asfalto abrasante. Ains! ¡qué pobres!

Cuando he encontrado Casa Lorena me ha transportado directamente al verano, claro que su localización también se presta a ello. El estudio de arquitectura Workshop rehabilitó esta casa centenaria en la ciudad mejicana de Mérida. Desde fuera su fachada de cuatro metros y medio, ya llama la atención gracias a su bonito color rosa pastel. Dentro, en un tetris de 125 metros cuadrados, se organiza la casa con un maravilloso jardín con piscina.

Entramos directamente al salón, donde se sigue con la paleta de color rosa en las paredes. Nos encontramos con un increíble techo de cinco metros de altura, cuyas vigas son originales de Francia de finales del S. XIX principios del S. XX. De ahí se accede directamente a la cocina a través de un gran arco. Destaca la gran isla central de cuarzo blanco que se combina con mobiliario en gris, haciendo juego con el hidráulico que discurre por todas la planta. Por favor, mirad el detalle de los dos banquitos de madera que se encuentran en una esquina de la cocina, supongo que a modo decorativo, además de preciosos le dan calidez al ambiente y pueden servir por ejemplo, como mesitas auxiliares en el salón, en un momento dado. El que no haya muebles altos, también es un acierto, permite contemplar toda la altura de la pared sin elementos visuales que interrumpan o acorten la altura del techo.

Y tras la cocina, una puerta nos da paso a un porche con un idílico comedor exterior. Madera, fibras, vegetación e incluso, una cornucopia barroca, conviven en él a la perfección. Este patio es el que divide la zona de día (salón, cocina, comedor) de la más privada (los dos dormitorios y el baño). Aquí, se han dejado las paredes originales y las han vestido con mucha vegetación, alrededor de la cual, una piscina alargada pone la guinda del pastel a esta bonita zona exterior.

La casa tiene dos dormitorios, uno de ellos está subiendo las escaleras y el otro se encuentra en la planta baja, a este se accede desde el patio y tiene su propio baño al que se le ha añadido ventilación y luz natural mediante un mini patio interior. El dormitorio también posee un oasis de relax con una pequeña zona de estar bajo una palmera. Está decorado de forma sencilla y en tonos que invitan al descanso, azules y tierras, colores que predominan también en el suelo de ambos espacios.

Casa Lorena que se encuentra en el centro de una ciudad, pero es como tener un oasis donde veranear todo el año ¿no os parece?

Imágenes: Workshop Diseño + Construcción

Introduce tu correo electrónico para suscribirte a este blog y recibir avisos de nuevas entradas.

La belleza de las curvas…

A la vista está lo que ha llamado mi atención de esta casa del barrio londinense de Walthamstow. Sus techos abovedados, a pesar de haber sido fruto de restricciones presupuestarías y una estricta planificación, han resultado convertirse en lo más peculiar y característico de a la misma.

La pequeña casa victoriana ya existente, sufrió una remodelación por la parte del jardín a la que se le adosaron dos extensiones algo inusuales. Como el presupuesto era muy ajustado, se inspiraron en las técnicas de construcción naval utilizando para ello, contrachapado de abedul en el techo creando así, esta forma tan característica como de casco de barco invertido que le aporta visualmente mucha amplitud, y al tener forma curva, ocupa menos espacio (tenían el hándicap de estar muy pegados a las casas colindantes). Para aportar más luz, en la parte más oscura de la cocina (al fondo, donde no hay ventanas) se instalaron tragaluces en los techos, de esta manera la iluminación natural estaría garantizada en toda la estancia.

Y ya que estamos, las curvas no sólo las podemos ver en el techo, otros elementos también las contienen. Como el diseño de la puerta corredera de la cocina, el acabado de las escaleras, piezas de mobiliario y decoración, o la mayoría de ventanas que dan al exterior. Por cierto, el gran ventanal del que disfruta la cocina dispone en su parte interior de un banco, por lo que si la ventana se encuentra tanto abierta como cerrada, pueden sentarte en él y disfrutar de las vistas del jardín.

En cuanto al color, hay dos zonas claramente diferenciadas. En los espacios comunes, predominan los tonos neutros junto a la madera, mientras que las zonas de noche se han enfatizado con tonos más oscuros que aportan calidez y elegancia. El uso del color es una manera muy efectiva de generar carácter e impacto a bajo coste.

El mobiliario me encanta, una sutil mezcla entre un continente moderno y un contenido con aire mid-century. Confieso tener mi pieza  favorita, la mesa y las sillas de comedor situadas en la cocina, aunque sin duda de esta casa me quedo con la parte arquitectónica, con el añadido de la cocina y sus techos abovedados en madera contrachapada de abedul. ¿No os resulta súper original?

Imágenes: Roar Architects

Introduce tu correo electrónico para suscribirte a este blog y recibir avisos de nuevas entradas.

Queen Anne House

Es el primer post de este año y ya estoy incumpliendo mis propios esquemas mentales, así que como dije el otro día en Instagram, mejor me dejo fluir porque luego no cumplo con mi absurda cabeza cuadriculada. Creo que siempre he tenido una lucha interna entre la Cristina ordenada, constante, trabajadora, con la que pretende ser creativa, libre y no regirse por esquemas ni patrones. No es una lucha agradable la verdad, supongo que en el medio está la virtud, como en todo, pero he sido tanto de la primera Cristina, que ahora necesito ser un poco más de la segunda.

Bueno que menudo rollo para empezar, sólo para deciros que mi plan era traeros el cambio low cost que hicimos en el aseo del pueblo durante las vacaciones (podéis verlo en Instagram, muchos me consta que ya lo habéis hecho y seguisteis las Stories durante el proceso). El caso es que ayer cuando subí las fotos al blog, dije – qué narices, esto no está terminado – así que lo dejo guardado para cuando pueda ofreceros algo más de sorpresa. Quiero meter un poco de color, poner vinilo en el suelo, un cuadro grande que también aporte algo de impacto, porque ahora mismo aunque bonito, le falta «vidilla». Lo dicho, si no lo habéis visto aún, podéis bien esperar a que lo termine del todo y lo publique por aquí, o abrir boca con el post que puse en Instagram (os lo dejo aquí), en cualquier caso el aseo está por rematar.

Y antes de empezar, se me olvidó felicitar a mi querido blog que a finales de diciembre cumplió la friolera de ¡14 años! ¿Cómo os quedáis? Creo que si sacara todos los post, daría para escribir un libro. Esa justamente es la Cristina constante. Y por supuesto, felicitaros el año, que groseramente me he puesto a escribir y no he dicho ni «mu», espero que hayáis tenido unas Navidades lo más tranquilas posibles y a ser posible, sin el bicho como compañero.

Os traigo para empezar esta belleza de 1915, con la que tengo ciertos sentimientos encontrados. Las obras de remodelación se llevaron a cabo por DeForest Architects y el interiorismo pertenece al estudio NB Design GroupNada más entrar se aprecia el contraste entre la antigua edificación de ladrillo y el añadido que se realizó como nueva entrada de la casa, a modo de porche acristalado, que lo inunda todo de luz. Me encanta cómo se ha resuelto el espacio con un simple perchero con zapatero incorporado, muy útil para dejar abrigos y zapatos al llegar. Un puf hace las veces de descalzador y el toque de las plantas le da sensación de confort a una gama cromática en negros y grises. Por cierto un acierto el suelo de cemento en la entrada para facilitar la limpieza.

Ya en el interior, se han respetado los suelos de madera y las carpinterías antiguas, pero se han pintado de blanco para aumentar la sensación de amplitud, incluidas puertas correderas, columnas de madera tallada o la barandilla de la escalera. El toque de color y la guinda del pastel de esta vivienda, al menos en mi opinión, son las vidrieras. De ahí que el mobiliario, sea en su mayoría en tonos neutros. Podemos ver también cómo en muchas ventanas se han añadido butacas, sillas o bancos, para poder disfrutar de las vistas del jardín, que por cierto, tampoco tiene desperdicio.

La cocina combina el aire clásico de la casa con los materiales modernos que se han introducido para darle contraste, como el acero inoxidable, la lechada oscura que remarca los azulejos, la gran campana,… y en la isla, se ha utilizado una encimera de madera, que tiene su réplica en el suelo y le resta frialdad al acero.

Los dormitorios están llenos de soluciones de almacenaje, zonas para trabajar, librerías,… lo cierto es que el tamaño también ayuda. Me ha encantado la idea de una cama de matrimonio central con la librería detrás y zona de trabajo bajo la ventana, pocas veces lo he visto (muchas con un vestidor, casi nunca con una librería).

Lo que más me ha desconcertado es el ático, parece que estás en otro lugar, una vivienda distinta. No es que no me guste, todo lo contrario, es que simplemente no creo que nadie que entre por la puerta, espere descubrir un lugar así cuando sube las escaleras ¿Qué opináis? Se oculta detrás de lo que parecen unas puertas de armario, pero realmente son unas escaleras por las que se accede al ático. Allí se encuentra un dormitorio y una zona de estar completa.

Cada habitación tiene su baño propio, el principal con una bañera profunda de madera, zona de relax y azulejos blancos con textura. Un segundo baño, muy original por cierto, tiene dos bañeras circulares y profundas también, enmarcadas bajo dos vidrieras y en el centro, un cuelga plantas que a su vez sirve de apoyo o pequeña estantería.

Y para rizar el rizo, la casa tiene además un estudio de arte con cocina ¿Alguien da más? ¿Qué os parece para empezar el año?

Imágenes: Haris Kenjar / Arquitectura: DeForest Architects / Diseño Interior: NB Design Group

Introduce tu correo electrónico para suscribirte a este blog y recibir avisos de nuevas entradas.

En recuerdo a Victoria Melián Randolph

Ojalá no tuviera que empezar con este post la temporada y no es por no hablar del estudio Melián Randolph y de sus proyectos, de los cuales ya he escrito en numerosas ocasiones en el blog, es que esta semana nos dejaba Victoria, que junto a su hermana Sylvia, formaban un tándem perfecto del interiorismo de este país. Y es que a pesar de ser conocedora de su enfermedad, la veía bien en las redes así que pensé que lo había superado y la noticia me ha caído como un jarro de agua fría.

A pesar de la admiración que siento a nivel profesional, tengo que decir y agradecer que en su día, abrieran las puertas de su despacho para mí, interrumpieran sus apretadas agendas para sentarse conmigo y darme consejos, algún contacto también, nunca voy a olvidar esa generosidad que no todos los «grandes» de esta profesión u otras disciplinas, dedican a personas anónimas como yo.

Ambas hermanas empezaron su andadura profesional por separado, Victoria, como decoradora en Nueva York y Sylvia como estilista, hasta que en el año 2000 decidieron aunar conocimientos y abrir su propio estudio.

Si he elegido este proyecto en concreto es porque creo que creo que les identifica bastante. Está ubicado en la Serranía de Ronda y justamente Andalucía, fue el lugar que las vio crecer.

Sus trabajos, aunque ajustados siempre a las necesidades del cliente, tienen puntos en común. Apuestan por ambientes cálidos y acogedores, pero con toques arriesgados. En sus proyectos nunca falta la artesanía, el arte, el respeto por la arquitectura local, las ricas telas o papeles pintados, las grandes alfombras, las antigüedades, las piezas orientales o marroquís, y los contrastes con otras de corte contemporáneo.

Son unas auténticas maestras de combinar culturas, colores, texturas,… fruto de haber vivido en varios países, haber viajado mucho, de patear museos, rastrillos, ferias, etc. todo ese poso que va quedando y que hace que te nutras de tantas cosas, que sepas crear armonía en la mezcla como pocos saben hacerlo.

Se nos ha ido una de las grandes, estoy segura de que su hermana Sylvia y el resto del equipo que compone el estudio, seguirán llevándolo a lo más alto. Adiós Victoria, te conocí poco pero me demostraste mucho. Descansa en paz y mucho apoyo desde aquí para toda la familia.

Introduce tu correo electrónico para suscribirte a este blog y recibir avisos de nuevas entradas.