Tocadores y más…

Hoy tiro de archivo porque si algo tiene este blog, es contenido infinito. En plena vorágine de venta de casa y compra de un piso, con todo lo que conlleva a nivel burocrático y de organización, me veo desbordada en estos momentos.

Cuando lo he leído me he dado cuenta de que echo de menos mi manera de escribir de entonces, creo que las entradas eran más auténticas, más «yo«. No sé si es que tenía más tiempo, estaba más inspirada o que tantos años de blog, van pasando factura. Lo cierto también es que entonces no había tantas redes, pero llegó Instagram y TikTok y la gente dejó de consumir blogs. Cada vez lo queremos todo más rápido y pocos se paran a leer un artículo, como mucho la gente entra y mira las fotos (las estadísticas hablan por sí solas). A veces me planteo si es bueno seguir con esto y más en momentos como ahora, que no tengo tiempo ni para respirar. ¿Qué pensáis vosotros? Igual recibo eco ante esta pregunta, porque no sé si alguien estará leyendo ;-)

¿Debería evolucionar en otras direcciones o sigo con mi blog que aún me da dinero? Aunque ya no tenga tanto público, a las empresas sí les interesa aparecer en Decofeelings ya que posiciono bien en Google. Seguiré pensando en ello.

Y sin más, os dejo con uno de mis posts escrito en 2017. Hablo sobre la tendencia de los tocadores (entonces no teníamos ninguno en casa, ahora sí).

Tocadores

Aún recuerdo cuando era pequeña e iba a casa de mis abuelas o de mi tía abuela (que para mí era la tercera porque ejerció como tal), todas ellas tenían en sus dormitorios esos preciosos tocadores antiguos llenos de artilugios de belleza que a mí me fascinaban y eso que de peque yo era bastante «chicazo». ¿Os acordáis de cómo eran aquellos frascos de perfume? esos preciosos botes de cristal tallado de los que prendía una cuerda con una especie de bola blandita en su extremo que había que apretar para que saliera el contenido, ¡ainss! cuánto perfume habré despilfarrado de mis abuelas en mi infancia por el simple placer de apretar la bolita y ver cómo salía la fragancia :-) ¿Recordáis también los cepillos de pelo nacarados o de plata que adornaban los tocadores? y digo adornaban porque aunque nunca los usé, creo que esas piezas tan delicadas jamás hubieran podido con mi maraña de rizos, pero qué bonitos eran. El caso es que antaño era frecuente ver tocadores en las casas, una costumbre que se ha ido perdiendo con el tiempo supongo porque precisamente es de lo que carecemos, así que el arte de embellecernos se suele ver reducido a cinco minutos en el baño y por supuesto de pie, una pena señores.

Pues bien, según un artículo de la revista AD los tocadores vuelven con fuerza impulsados por la corriente «slow life», aunque soy algo escéptica en este sentido porque conozco a poca gente que de verdad pueda presumir de una vida verdaderamente slow. En mi entorno no sé de nadie que tenga un tocador en casa y eso que tengo amigas bastante coquetas.

Por si sois de las que os gusta seguir las tendencias o queréis daros el capricho de tener un rincón «beauty» para dedicaros unos mismos, os traigo un montón de firmas donde podéis encontrar tocadores. Conste que no son como los de antes, los que os enseño son más modernos. También veréis ideas crear vuestro propio córner de belleza, porque si nos ponemos en plan prácticos en realidad con un pequeño escritorio (si tiene cajones mejor) y un espejo sobre éste, sería suficiente. Y para los que podáis pensar que el espacio es un problema, os traigo uno en versión mini, plegable, que una vez usado se queda recogido en la pared como si de un armarito se tratase (no es lo mismo ya lo sé, pero cumple su función). Además de las firmas que os he mencionado, también he seleccionado alguna que otra imagen de inspiración. Yo por mi parte seguiré maquillándome (cuando lo hago), en el baño, de pie y en cinco minutos; prefiero quedarme con el dulce recuerdo de los tocadores de mis abuelas.

Tocador Sphere de Portobello Street

Tocador Salome de Maison du Monde

Tocador Blush de Maison du Monde

Tocador VENERE de Gallotti&Radice

Tocador Ren de Poltrona Frau

Tocador Kara de Natevo

Con este tocador ningún ángulo de la cara quedará descuidado ;-) Para las más coquetas y coquetos, que ellos también tienen derecho.

Tocador CHANDLO de BD Barcelona

Tocador FLÄPPS SCHMINKTÄNK de AMBIVALENZ

Especial espacios mini.

Tocador W1 de ODESD2

Escritorio y tocador, dos en uno.

Tocador Songmics en Amazon

Inspiración

Esta monada con formas redondeadas se vendía en Urban Outfitters por desgracia ya no está disponible.

Consola de Wayfair con espejo encima (vía: Mr. Kate)

Mesa escritorio de Ikea utilizada a modo de tocador.

Otro truco para ahorrar espacio y tener dos funciones, sustituir la mesilla de noche por un tocador.

De nuevo tocador y mesa de trabajo, dos en uno.

Fotos inspiración de mi panel de Pinterest: Bedroom
Imagen portada Amazon

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32 metros cuadrados…

Voy con un día de retraso, se supone que publico los jueves, pero ayer tuve literalmente un shooting en casa. Vender una vivienda ya no es lo que era y muchas inmobiliarias se han quedado desfasadas. Ahora te preparan la casa para la venta, home staging se llama (tenéis post relacionados con este tema), por suerte a mí no me han tocado nada en cuanto a decoración se refiere porque me dijeron que la casa estaba muy bien :-), pero sí que había que despersonalizarla para que el futuro comprador la vea como suya, así que fuera fotos y objetos decorativos que no aportan, pequeños electrodomésticos en la cocina innecesarios a la vista, algunas cosas de las habitaciones de mis hijas que, como adolescentes que son, acaparan trastos sin sentido,… en fin, ayer me di una pequeña paliza que, si Dios quiere, servirá para impulsar la venta del chalet más rápido.

Es una pena porque nosotros ya teníamos fotos profesionales hechas por mi suegra (para los nuevos por aquí, tiene multitud de premios de fotografía), pero aquel día el tiempo no acompañaba y nos faltaba la luz del sol ¿Qué es una casa sin luz? más cuando la mía tiene la fachada principal con orientación sur y es súper luminosa. Decidimos repetir la operación con una inmobiliaria que no trabaja al uso y en la que tengo depositada mucha confianza. Si todo sale bien, no dudéis que os daré el nombre porque las buenas experiencias y el trabajo bien hecho, hay que compartirlo.

Hablando de inmobiliarias y venta de casas con encanto, no se me ocurre ninguna mejor (en cuanto a la presentación de sus viviendas) que las de Alvhem, para esto los nórdicos sí que saben. O quizás sea porque este estilo de decoración entra por los ojos, lo que se busca cuando vendemos, un minimalismo acogedor, así lo definiría yo.

Este pisito de tan sólo 32 metros cuadrados, situado en una última planta de un edificio en Gotemburgo, se vende solo. La vivienda está concebida como un espacio abierto, aprovechando que los grandes ventanales lo inundan todo de luz. Para acentuar ésta, además se han añadido espejos estratégicamente que amplían más el espacio. Otro gran recurso es la utilización del color, una base blanca combinada con tonos neutros (tierras, grises, negros) nunca falla, de tal manera que el espacio resulta muy acogedor. El toque verde de las plantas es un «must», decorativas y frescas.

Para ocultar parte del dormitorio, se ha recurrido a un medio murete donde, por un lado, encontramos el comedor y detrás, se sitúa la cama pero sin llegar a cerrar el espacio al completo (intimidad sí, pero seguimos en una estancia abierta). Se ha aprovechado bajo la ventana, de orientación sur, para crear una zona de trabajo con un sencillo escritorio de Ikea y el armario se ha vestido con puertas de espejo, ampliando visualmente el espacio y reflejando la luz. El baño es la única estancia que se encuentra separada, obviamente es la habitación donde más privacidad se necesita.

Como veis este pequeño apartamento, se vende solo. Cierto es que sus ventanales (no sólo la amplitud de los mismos sino también su forma arquitectónica), ya son todo un reclamo. Pero, además, está decorado de tal manera que cualquiera que entre, se sentiría como en casa. ¿No creéis?

Fotografía: Alvhem

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Un coqueto piso en Vitoria…

Me doy cuenta de que soy un poco cambiante respecto a lo que os enseño, paso de las súper casas a las mini cabañas (como la de la semana pasada), como si no hubiera término medio, cuando en realidad los pisos en torno a los cien metros cuadrados son la inmensa mayoría. El que estén bien aprovechados o no, tengan reformas acertadas, o incluso sean bonitos o feos, eso ya es harina de otro costal, pero la realidad es que representan la mayoría. Así que hoy me he detenido en uno de ellos, con una rehabilitación bien resuelta.

El proceso de reforma y decoración lo llevó a cabo OE arkitektura fundado por Oihane Eguren. En origen el piso constaba de tres alturas, pero la última se segregó, quedando dividido en dos. El reto era crear un espacio en calma, neutro y lleno de luz, algo que la antigua escalera de corte tradicional y con madera de Iroko hacía imposible, ya que suponía una auténtica barrea visual en el centro del salón.

Se modificó dicha escalera añadiendo barandillas de cristal y los peldaños (que ofrecen más funcionalidades, como asientos extras o baldas), se unificaron con el mismo tono de madera del resto de la vivienda, tanto suelos, como baldas del salón, incluso mobiliario, cocina o la zona de dormitorios. Ahora todo sigue una continuidad visual enfatizada por el uso del color en los textiles (los blancos y tierras).

Parte de las piezas de mobiliario son de obra, pero muchas otras son de firmas muy conocidas y no excesivamente caras, lo normal para una pareja que está empezando. Así, encontramos en el salón el sofá Singa de Kave Home o las mesas auxiliares Jeanette, de la misma firma. El mueble de la televisión se hizo a medida, los textiles son de Costa Massana y las plantas de Margarita me llaman. La alfombra es de Leroy Merlin. En frente, encontramos el comedor con mobiliario de nuevo, de Kave Home.

La cocina es uno de mis espacios favoritos, de Dica cocinas. La mezcla de mobiliario en blanco mate, en su parte inferior, con los muebles superiores de Olmo y la encimera blanca con veta en gris, es un acierto total. Da continuidad al resto de la casa y hace de esta cocina un remanso de paz, además de tener el privilegio de estar bañada de luz natural que entra por la ventana que se encuentra al lado del office. Este está compuesto por la mesa Rönninge de Ikea y sillas modelo Esta de Maison du Monde.

El salón/comedor, con la escalera como protagonista, son las zonas que se han dejado abiertas en la casa, sin embargo y a pesar de que la cocina se mantiene como espacio independiente, al igual que dormitorios y baños, todos mantienen un mismo hilo conductor gracias a los materiales utilizados y al color.

En el dormitorio nos encontramos con un bonito cabecero tapizado de Kenay Home, el modelo Flen. Le acompañan las mesillas Hegas de la misma firma, cuyo acabado en madera sigue el mismo patrón del resto de la vivienda, sobre ellas, lámparas Lombok también de Kenay. El look lo completan unos sencillos textiles blancos con cojines en tonos verdes que aluden a la naturaleza, al igual que las plantas, que no faltan en ninguna estancia de la casa, ni siquiera aquí en el dormitorio.

Los dos baños persiguen también un estilo natural, ambos con muebles en madera hechos a medida y encimera porcelánica. Los lavabos sobre encimera son de Roca. Se les ha añadido el toque negro en griferías y mamparas, esto se repite en otros elementos de la casa (como apliques, grifería en la cocina, adornos…) que unifican más, si cabe, el conjunto. Para los azulejos en uno de los baños, se le ha dado un toque Wow y nunca mejor dicho, porque así se llama la firma. Son los azules, colocados en la ducha en vertical, aunque se pueden poner en múltiples posiciones (particularmente me encantan colocados en forma de espiga). Sobre ellos, hablo con conocimiento de causa, los utilicé en una obra y quedan realmente espectaculares.

¿Qué os parece el piso? Para mí es sereno, confortable, con el tamaño ideal, alegre por su luz, y si ya tuviera una pequeña terracita, por favor que me lo envuelvan para llevar:-)

Imágenes: OE Arkitektura

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BABELstudio

No tenía claro si dejar el post para mañana porque hoy es el cumpleaños de mi hija mayor, ¡19 ya! El tiempo pasa volando. Pero como estamos entre semana y las rutinas son lo que son, las celebraciones las dejamos para el fin de semana. Así que aquí estoy con mi dosis «deco» del jueves.

No sé si a vosotros os pasa lo mismo, hace tiempo que me cansé de los cerramientos de hierro y cristal, pero es algo que no me pasa con los de madera supongo que porque su peso visual no es el mismo. También os diré que cuando hablo de los de hierro, me refiero a los de perfilería negra, me resultan pesados. Estos de hierro se pueden lacar y hay tal variedad de tonalidades más amables como los topos, beige, colores pastel, azules,… ya la vez, distintos grosores más finos para poder elegir, que se me antojan más elegantes, discretos e incluso a veces, con formas curvas que llegan a ser muy originales (en esta carpeta de Pinterest podéis ver algunos ejemplos).

Todo esto viene justamente a lo que ha llamado mi atención en esta casa. Se trata de un proyecto de reforma integral en el casco viejo de Bilbao de BABELstudio . Como en la mayoría de los pisos antiguos, un largo pasillo distribuía los distintos espacios así se apostó por aprovechar todas las ventanas que daban al exterior, incluida una balconada en esquina (donde se situó la cocina) y dejar los baños y zona de servicio en la parte interior. Ahora, tanto el salón, el comedor, la cocina y los dos dormitorios, disponen de luz natural y gracias a los cerramientos de madera y cristal, se ha podido por un lado, independizar la cocina para tener un espacio cerrado pero integrado al salón a la vez y por otro, lleve luz al pasillo que había quedado en la zona oscura de la vivienda.

Bajo la carpintería divisoria, se ha aprovechado para realizar muebles a medida que sirven de almacenaje y llevan el mismo acabado lo que da continuidad. Al igual que las carpinterías de madera envejecida de las puertas, que tienen su réplica en el acabado del suelo.

Para conservar elementos del pasado, se dejó a la vista la viga que atraviesa el techo de la cocina y parte del pasillo, así como la pared de ladrillo de la zona del salón comedor. Recursos que potencian el carácter de la vivienda y que hace que no sea tan necesario invertir demasiado en decoración.

Si os fijáis, pocos muebles y muy sencillos. Algunas fácilmente reconocibles como la cama de Ikea, o la lámpara del salón (de la misma firma), las sillas CH24 Wishbone (quizás originales, aunque también pueden ser de imitación, a un precio mucho más económico) o la mesa, que la tenéis prácticamente igual en SKLUM, por poner algunos ejemplos. No hace falta mucho contenido cuando el continente habla por sí solo, eso sí, que nunca falte el toque verde de las plantas :-)

Imágenes: Biderbost Photo y BABELstudio

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Diseño vs funcionalidad…

Ahora ya sí, inmersa en mis rutinas, vuelvo a los posts con contenido de decoración. Me ha costado la mitad de septiembre coger el ritmo normal, eso me pasa por postponer tareas y dejar las cosas para el último momento. No suelo ser así, pero entre la pereza de las vacaciones y, sobre todo, el momento vital en el que me encuentro, sencillamente es lo que ha sucedido. Por suerte me he puesto las pilas al llegar y parece que mi actitud está cambiando, espero que este inicio de curso que está siendo productivo, pueda mantenerlo en el tiempo. De hecho, tengo pensado algunos cambios para esta temporada, cambios que aún he de darles forma, ideas que rondan mi cabeza para ofrecer mis servicios de decoración de una forma más rápida y democrática (como diría el gigante sueco), pero esto ya os lo contaré más adelante cuando tenga las ideas más «masticadas».

Cambiando de tema y respecto a la vivienda que hoy nos ocupa, andaba yo fascinada con este, cuanto menos, curioso piso, hasta que me he percatado que quizás no todo vale en cuanto a diseño y arquitectura se refiere. Precisamente lo que más había llamado mi atención, esas escultóricas escaleras en acero, en un precioso tono azul que destacan sobre un lienzo neutro, me ha hecho replantearme la seguridad de las mismas. Viendo las imágenes una y otra vez, me he dado cuenta de la altura de los peldaños, luego he pensado en personas como yo (que últimamente además de no ver ni castaña, pierdo el equilibrio y vivo más a ras del suelo que de pie). ¿Podéis imaginar una caída desde la escalera contra la base de la chimenea de cemento que se encuentra justo debajo? ¡Auchhhh! ¿Todo vale para conseguir un diseño bonito? Quizás una distancia menor entre los peldaños o mejor aún, un pasamanos, evitaría este problema ¿no?. Menos elegante, quizás…, más seguro, por supuesto.

Independientemente de este punto, que para mí sería un cambio sin duda, al resto del piso no le pongo ningún «pero». No es una casa convencional, se trata de la vivienda de un director de cine cuya intención era albergar a 10 o 12 personas para poder convivir a la vez que trabajar, a modo de «campamento creativo», una manera de tener a su gente reunida en todo momento para hacer reuniones, «brainstorming», presentaciones, etc.

Muchas de las cosas que aquí se hicieron fue pensando en esta idea precisamente. Una enorme mesa de comedor frente a la chimenea, y a la vuelta la cocina, múltiples sitios donde tumbarse y relajarse para compartir ideas, dormitorios convencionales, en literas o en altillos, puertas correderas que conectan exterior e interior, todo con el fin de que la comunicación fuera lo más fluida posible.

Todo el trabajo de construcción se realizó a distancia durante la pandemia, tras ella, sólo quedó determinar cómo amueblar y colocar los accesorios para que cada espacio pudiera ser aprovechado de la mejor manera posible. Así, encontramos muebles sencillos, muchos los reconozco de la firma Ikea, cestos y almacenaje dispuestos por toda la vivienda para mantener el orden (fundamental cuando convive tanta gente), por supuesto las notas de arte no pueden faltar en un espacio creativo y nada de saturar los ambientes, precisamente porque la comunicación ha de ser fluida.

¿Qué pensáis de esta vivienda / estudio? ¿Cambiaríais algo o la dejaríais tal cuál?

Fotografía: Matej Hakar / @matejhakar Para: Dwell

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De escuela rural a vivienda

A estas alturas de la vida del blog, sigo encontrando interioristas a los que admiro y que curiosamente, no habían pasado por aquí. Tanto buscar fuera de las fronteras, cuando tenemos lo mejorcito en producto nacional. En este caso me refiero al bilbaíno Mikel Larrinagacuya trayectoria profesional cuenta con más de 40 años. Importante también que sepáis que tiene un perrete adorable, que bien podría ser el hermano mayor de mi Titi y que se llama Pantxo :-) Esto nada tiene que ver con interiorismo, pero une mucho, qué demonios.

El proyecto que veréis hoy es una antigua escuela situada al norte de Burgos, allí donde las casas de piedra y teja se mezclan con el Románico más puro y animan a conservar el espíritu de las construcciones de antaño. Larrinaga quiso transformar la escuela y convertirla en vivienda pero recuperando los elementos arquitectónicos originales, como ventanas, vigas, el suelo,… todo data de 1936. Lo combinó a su vez, con elementos industriales (el ejemplo más obvio es la cocina) y colores neutros que transmitieran paz. El toque final, como en casi todos los trabajos del interiorista, fue una acertada mezcla con piezas de brocantes y antigüedades.

Ya en la entrada podemos ver una gran composición de láminas procedentes de un herbolario que datan de los años 60, toda una declaración de intenciones. En el comedor destaca la imponente visión de la vitrina, las sillas se compraron en un brocante de Francia y la mesa de corte antiguo y campestre, en Isabel Madinabeitia.

El salón se divide en ambientes, el comedor hacia un lado, la zona de estar y por otro, con la tarima elevada tal y como estaba en la escuela, una pequeña zona de estudio. En ella, tanto la mesa como la silla de hierro también son antigüedades. El salón, además, comunica con la cocina y un baño. Al entrar en la cocina, un imprescindible, porque ¿quién puede vivir sin pizarra en la cocina? (yo desde luego tengo una en mis dos casas), ojalá fueran como la de esta vivienda, se trata de la pizarra que encontraron en el aula de la antigua escuela, la idea no me puede gustar más. Bajo ella, una mesa de oficio adquirida en una feria de antigüedades de Francia. Respecto a la pared de enfrente, se ha respetado su aspecto original de piedra. Los muebles de acero de Ikea crean un gran contraste y para suavizar, un precioso vajillero procedente de la India, mantiene toda la loza a mano y a la vista.

En la planta superior se encuentra el dormitorio, vestido con ropa de cama de Zara Home y cojines de Vap Decoración. Aquí también encontramos antigüedades como las mesillas, de Antigüedades Cerrajería, los apliques son de Susaeta. Vemos que el suelo en el piso superior se ha sustituido por baldosas de barro artesanales, en lugar de madera.

Seguimos por el baño, incluso aquí las piezas singulares y la antigüedades siguen haciendo acto de presencia. Lo que más llama la atención es el maniquí, procede de China y lleva puntos de acupuntura. Por otro lado, el mítico taburete Tolix, versión original de un desembalaje francés. Los apliques son de Luz Bilbao y lo más sencillo el espejo, que es de Ikea.

Pero si algo llama la atención en esta casa, es su patio. En origen era una ruina adosada a la escuela, que en los años 70 se convirtió en pajar. Ahora permite tener una zona de porche con comedor más la de estar, y otra de exterior. En la zona de porche, un retablo antiguo preside el espacio de estar, con muebles recuperados de un bazar. En el otro extremo, encontramos un comedor con mesa procedente de un anticuario y sillas de brocante, junto a éstas, una cocina de obra con barbacoa.

Sé que Burgos no se caracteriza precisamente por su buen tiempo, pero en los días soleados, aunque fríos, y durante el verano, ese patio es oro puro. ¡A mí no me sacarían de ahí!

Fotografía: Montse Garriga para Elle Decor

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Directora Creativa Interiorismo

Sigo a Montse Morales en Instagram desde hace años. Su cuenta, @directoracreativa, es pura inspiración y su trabajo, absolutamente impecable. Dudaba si publicar esta casa, que por cierto es su vivienda, ya que me sonaba hasta tal punto que pensé que ya la había sacado en el blog, pero no, sencillamente es que la he visto tantas veces en sus stories y en su feed, que por ello me era tan familiar. Así que después de saber que se trata de la casa de Montse, tenía que compartirla.

La vivienda se encuentra en Premià de Mar, Barcelona. En un principio eran dos casas unidas, separadas por un muro que ella tiró. Antes de hacer la reforma integral, estuvo viviendo en ella tres meses, con el fin de saber lo que le demandaría en un futuro. Las casas se dividían justo por donde se encuentra ahora el pilar. Fue necesario reforzar con una gran viga de 7 metros, además de colocar el mencionado pilar que fue adquirido en un anticuario.

Todo el suelo de la casa está revestido de un precioso y robusto roble, incluido las escaleras. Y las puertas, se consiguieron reciclándolas de una antigua masía.

La planta baja es abierta, así mientras se cocina pueden interactuar con quien esté en el comedor e incluso en el salón. Pero, además, tras la isla se encuentra la habitación de juegos, por lo que Montse o su pareja pueden controlar a los niños mientras cocinan. El concepto abierto se lleva hasta las últimas consecuencias, todo queda a la vista en la cocina. Esto sólo es apto para personas muy ordenadas o desde tu salón todo parecerá un caos (por mucho que te guste, piensa en esta opción antes de hacerla). En el caso de Montse quería algo así de funcional y para ella no había problema ya que se considera más ordenada que la propia Marie Kondo. La cocina se hizo a medida por un ebanista y la encimera es de Silestone.

El comedor se encuentra a continuación de la isla. La madera y las fibras vegetales le dan calidez al blanco inmaculado de la misma. También detalles como la colección de tablas de madera, a las que Montse diseñó un expositor especial, aportando también un toque cálido y original.

Las baldas continúan desde la cocina y a través del pasillo hacia el estudio de Montse, un añadido que se realizó en el patio y donde ahora, tanto ella como su equipo, tienen su lugar de trabajo.

Aunque parezca raro, en esta casa sólo hay un baño y es que Montse pensó, que llevando horarios diferentes los niños y los adultos, para qué más. Yo soy de la opinión que un baño y un aseo es lo perfecto, para una emergencia siempre viene bien, porque a veces nos volvemos locos con tanto baño y al final sólo dan más trabajo (hablando de una familia de no más de cuatro miembros, como es el caso). Por cierto, ¿os habéis dado cuenta de que hay un mismo suelo en todo el baño, incluido en la ducha?, es un truco decorativo que consigue dar más amplitud al espacio.

En el dormitorio de la niña, se ha creado como un lugar de refugio en la zona de la cama. Se le han añadido baldas que actúan de mesilla y tienen mucha capacidad de almacenaje. Así mismo, por la zona exterior, dedicada al estudio, las baldas continúan a modo de estantería. Me encanta la mesa, tiene un aire antiguo y sin embargo es de Maison du Monde (como muchos otros muebles de la casa), lo han combinado con una silla moderna de Ikea y queda realmente bonito y práctico.

El dormitorio principal sigue la misma línea, predomina el blanco y son las fibras y la madera las que aportan calidez. La ropa de cama de Calma House, le dan el toque de color. Como algo original, espejos a cada lado de la cama, son de Maison du Monde.

Y qué decir del patio, Montse cerró la mitad a modo de invernadero y creó una zona de comedor con una gran mesa, un banco, taburetes, textiles de Calma House, plantas y un bonito espejo de Maison du Monde, un espacio que invita a pasar allí largas horas. Pero además dejo otra zona exterior, con un gran árbol para dar sombra, un par de butacas, de pufs de mimbre de Ikea e incluso un brasero para calentarse en los días fríos, que, poniéndole una tapa de madera, se convierte en mesa auxiliar.

La mires por donde la mires, esta casa es una maravilla y si os habéis quedado con ganas de más, sólo tenéis que seguir a Montse en Instagram para conocer no sólo su casa, sino todos los proyectos que hace, a cuál más bonito.

Imágenes: Jordi Canosa / para Elle Decor

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Claros y oscuros

Hoy quería salirme del guion, ahora que tanto se lleva la decoración en los tonos neutros. Sin que sea una crítica a esta tendencia, que particularmente me transmite mucha paz, lo que no hay que negar es que al final casi todas las casas son un poco «más de lo mismo» y de vez en cuando, para variar, viene bien que te recuerden que existe el color y más allá de eso, que saber combinarlo es todo un arte. En la vivienda de hoy veréis un claro ejemplo de cómo conviven los tonos oscuros, con los claros, con colores vibrantes e incluso pastel, todos en perfecta armonía.

Se trata de un proyecto de rehabilitación y reforma del equipo Mon Concept Habitation, para una vivienda de 280 metros cuadrados con casi ochocientos de jardín. El arquitecto del equipo que llevó a cabo el trabajo fue Camille, con la premisa de redistribuir y hacer funcional los espacios, pero sin perder la esencia y la historia del edificio.

La casa está compuesta por cuatro plantas. Ya desde que entras por la puerta, encuentras una declaración de intenciones con las distintas combinaciones cromáticas, ese brusco choque entre el blanco inmaculado, inundado de luz del recibidor y la sala de estar, junto a un precioso negro intenso en las paredes de la escalera, “Off-Black” de Farrow & Ball. Y que también contrastan con las baldosas hidráulicas originales del suelo de la entrada. La combinación no puede ser más bonita.

Tanto en la salita de estar (a la izquierda de la entrada) como en el salón (a la derecha de la misma), se perciben los elementos arquitectónicos originales de la vivienda que han sido respectados en la restauración, como las molduras, la chimenea, la gran altura del techo o los grandes ventanales. A través del salón se puede apreciar cómo asoma la cocina, a la que sí se sometió a una reforma integral.

Un antiguo taller mal aislado, se ha convertido en el alma de la casa. Mediante un cerramiento de hierro y cristal, este espacio goza ahora de gran cantidad de luz natural y está rodeada de naturaleza. Dispone además, de puerta directa al jardín. El mobiliario se ha puesto en color verde, como si fuera una extensión de la parte exterior, encimera Domoos de Dekton y de manera simbólica, los propietarios han mantenido en la pared los ladrillos vistos que son los mismos que se encuentran en la fachada del edificio.

Bajo el ventanal de la cocina, encontramos una gran zona de comedor, con banco a medida, todo el conjunto está realizado en roble. Lo completan unas colchonetas en color verde, a tono con los muebles de la cocina y la vegetación exterior, y tres lámparas de Le Petit Florilèg.

Contiguo a la cocina, se ha diseñado un pequeño espacio de trabajo en un bonito azul grisáceo combinado con madera. Está hecho a medida mezclando líneas curvas y rectas, un diseño que le aportan dinamismo y funcionalidad. Además de la oficina, tras un separador de ambientes de barrotillos de madera, se ha realizado también una zona de vestíbulo con armarios, perchero, zona para los zapatos, etc. siguiendo la misma gama cromática.

Y de repente llega la oscuridad, con la pintura negra de Farrow & Ball que recorre las escaleras y que hace un bonito contraste con los suelos, los escalones y el pasamanos de madera. Pero no tardará en volver la luz, nada más subir a la izquierda, encontramos el dormitorio principal, inundado de luz gracias a sus dos ventanales enmarcados con cortinas de terciopelo amarillo y que dan al jardín, además de su pintura blanca.

A continuación, una habitación antes inutilizada, se ha convertido en un osado vestidor color terracota. Son todo muebles adaptados de IKEA. Le sigue la habitación de invitados donde el protagonismo recae en el papel mural de la pared de Isidore Leroy.

El baño principal es una de mis estancias favoritas. Combina hormigón encerado, con mosaico HEX Calacata, griferías y perfilerías en color negro y carpintería en cannage.

Todavía hay que subir un piso más, volviendo al contraste de color entre el negro de la escalera y el blanco del rellano al subir, incluso el parquet se ha pintado en este último piso enfatizando la luminosidad que entra por el Velux del techo. Allí nos encontramos una gran sala de juegos para los niños, también un vestidor (al igual que en el piso inferior, realizado con muebles de IKEA) esta vez pintado de amarillo.

Junto a las habitaciones, el baño infantil, precioso también. En esta ocasión con bañera revestida de azulejos blancos Bakerstreet de Leroy Merlin y en el suelo, mosaico de The Mosaic Factory. Se combina en las paredes, con un bonito verde y al igual que en el otro baño, la grifería y perfilería van en negro. Los baños son, los mires por donde los mires, preciosos.

¿Qué os ha parecido la casa de esta semana? Diferente pero bonita ¿verdad?…

Imágenes: Mon Concept Habitation y Marie Claire Maison

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Villa Rosario

Dicen que cambiar el nombre a una casa da mala suerte. No sé si por eso, o porque me gustó el nombre cuando lo vi, no se lo cambié a la casa que compramos en el pueblo, que hacía referencia a la antigua propietaria, «Villa Amelia». Ahora ninguno nos llamamos así, pero quise respetar sus raíces que, si bien no es una casa centenaria como la de hoy, va por el camino. Si no me equivoco tiene unos 60 años.

Lo mismo sucedió con esta vivienda centenaria en Málaga, habitada desde siempre por una mujer llamada Rosario a la que los nuevos propietarios quisieron honrar poniéndole por nombre «Villa Rosario». No sé si a vosotros os pasa, pero eso de ponerle nombre a las casas, tiene su encanto, parece que las hace más humanas.

Cuando adquirieron la vivienda llevaba vacía unos treinta años, pero estaba claro que había sido mantenida y cuidada. Se buscó la mejor manera de adaptarla a las necesidades de la nueva familia, pero manteniendo su esencia. Para ello fueron asesorados por arquitectos amigos, así como por Paco González, también arquitecto y nieto del que diseñó la casa.

La vivienda está dividida en tres plantas, las dos primeras de 75 metros cuadrados y la última de unos 35. Pero, además, tiene un patio trasero conectado con la cocina y otro más, en la parte delantera de la vivienda.

La planta baja son las zonas comunes, el salón, comedor, cocina, aseo y el patio e incluye una pequeña sala de juegos. En la segunda encontramos 3 dormitorios con dos baños y un par de terrazas. Por último, la tercera planta es un torreón, donde han situado dos pequeños despachos.

Respecto a los materiales y revestimientos, se ha querido conservar prácticamente todo lo que había. Los suelos hidráulicos siguen en su sitio dándole gran personalidad a la casa, las carpinterías también se restauraron para mantenerlas en su estado original, se arreglaron las escaleras (aunque se mantuvieron como en origen) y en las paredes, se decidió dónde dejar las zonas en las que se veía el ladrillo y la piedra original y en cuáles se aplicaría mortero de cal.

La cocina finalmente se dejó donde estaba ya que su disposición era perfecta, tenía salida directa al patio trasero y quedaba abierta al salón. Una gran puerta pivotante de la firma Jansen le da un aspecto muy moderno que contrasta con el resto de elementos. Para los muebles, se optó por el sistema CUBRO, un sistema que te permite personalizar los muebles de Ikea consiguiendo proyectos modernos y sencillos, a precios económicos. Y a la vista está los diseños tan originales que se pueden conseguir. A mi manera de ver, no se podría haber elegido mejor opción para esta casa, le va como un guante.

En el patio, no se pudo conservar el cien por cien del antiguo suelo, así que después de levantarlo, sanearlo y aislarlo, una parte del mismo decidieron cubrirlo con cantos rodados, de esta manera se aporta dinamismo al espacio y se crean distintos ambientes. Por un lado, una zona para estar y por otro, se aprovechó la bañera original de la casa que hace las delicias de los dueños cuando el tiempo les permite darse un baño bajo la luz de las estrellas.

Respecto a la decoración, vino determinada por los colores originales de los suelos hidráulicos, de tal forma que se optó por utilizar una base neutra, sobre todo predominan los blancos y la madera. Pocas piezas pero muy bien elegidas, nos recuerdan al estilo mid-century, pienso que en un afán de no perder el «alma» de la casa y por supuesto, como recuerdo a Rosario. Se pueden ver iconos del diseño como la silla Cesca, creada por Mercel Brauer en 1928, o la mesa Tulip de Eero Saarinen, también el famoso pájaro Eames House Bird de Vitra que se encuentra en cualquier casa de diseño que se precie, y conocidas lámparas como la Cesta del diseñador Miguel Milá para Santa y Cole, y la colgante de Poul Henningsen para  Louis Poulsen, entre otros. Todo un paraíso del buen hacer, el buen gusto y el respeto a una historia ¿No creéis?

Imágenes: Germán Saiz para AD

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Estudio Do.Dark

Que una casa no tenga una gran antigüedad, no significa que no necesite una puesta a punto e incluso una reforma integral. Puede que su distribución ya no se adapte a tus necesidades, o que los materiales con la que fue construida en su día sean deficientes en cuanto a aislamiento u otras prestaciones, y por supuesto, el paso de los años habrá hecho mella también en el deterioro de instalaciones. A esta vivienda en Madrid de 350 metros cuadrados, se le sometió a una reforma integral para, por un lado, abrir los espacios que estaban muy compartimentados, por otra parte, conectar más las casa con el jardín ¿Quién quiere un jardín si luego no haces uso de él? y se le dio la vuelta a la distribución buscando una manera más lógica y funcional de que todo fluyera, sobre todo la luz.

Uno de los propósitos clave de los propietarios, era lucir su colección de arte y de piezas especiales de mobiliario, que es justo lo que ha llamado mi atención. De todo esto se ha encargado el estudio Do. Dark.

Ahora, desde el recibidor se pueden ver todos los espacios conectados. Por un lado, de frente se divisa el jardín y a ambos lados del recibidor, un salón con chimenea y un gran comedor que, aunque parezcan independientes, se pueden cerrar a demanda mediante puertas correderas. Tras el sofá encontramos una gran librería, diseño del estudio, que a su vez oculta la escalera que lleva al segundo piso. En ella albergan su gran colección de libros, así como piezas de arte a las que le tienen mucho cariño, como la talla religiosa.

El estudio consiguió también que la luz campara a sus anchas derribando tabiques, realizando un cerramiento de cristal para la cocina y colocando un par de ventanas Velux en el tejado.

En estas estancias llaman mucho la atención ciertas piezas como el perchero de la entrada, adquirido en la feria Almoneda, o las butacas de los años 70 azul y roja del salón, aunque no lo creáis se encontraron en la basura y se retapizaron con terciopelos de Gancedo dándoles una nueva vida y cuyos colores, siguen el ritmo de la obra de arte que les acompaña, de Luis Fernando Martín de los Santos. Como ritmo también le dan a las mesitas blancas de centro, los jarrones de colores de Anthropologie.

En el comedor encontramos una gran mesa blanca hecha a medida por el estudio acompañada por las conocidas sillas Wishbone que le dan calidez, la alfombra es de BSB y el espejo de Asitrade. Les acompaña una obra XXL de Blanca Orozco.

Desde comedor por el pasillo, se accede a la cocina, muy minimalista. Como decía antes, un cerramiento de hierro y cristal se encarga de que la luz siga fluyendo. El suelo de gres de gran formato es de Azulejos Peña. Los muebles son lacados y la encimera es de Silestone Blanco Zeus. Las lámparas no me van mucho, son en Westwing, yo hubiera metido algo que le diera calidez a la cocina o quizás color (como el resto de la casa), todo tan blanco y plateado me resulta un poco «cocina laboratorio».

El dormitorio sobrio, sin más. Lo que más me gusta es la silla Tulip, porque donde esté un clásico… Los taburetes también tienen su gracia, me ha sorprendido saber que son de Ikea.

Y por último el baño, que me resulta un tanto frío, como la cocina. Mismo suelo de Azulejos Peña y una ducha con mampara de cristal traslúcido que preserva la intimidad, pero todo blanco y sin notas cálidas. No es mi estilo, pero sobre gustos…

Sin duda alguna de esta casa me quedo con el salón, comedor y entrada por el impacto del arte y el mobiliario, que claramente llaman mucho la atención. ¿Qué opináis?

Imágenes: Montse Garriga Para: Elle Decor 

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