¡Felices Fiestas!

Mi intención era seguir el ritmo de publicaciones durante la Navidad, pero no va a ser posible. Tampoco son días en los que piense que debáis estar pegados al ordenador esperando uno de mis post, eso nunca, seamos realistas :-) Pero, aunque al blog le venga bien seguir su ritmo de artículos, a su dueña no ;-) Ya sabéis que las Navidades me alteran bastante, a día de hoy no tengo los regalos comprados y mañana nos vamos al pueblo. Estaremos entre los pinares Sorianos y Madrid, con lo cual más trasiego, así que ni siquiera tengo opción de pedirlos por internet porque vamos a estar en modo Willy Fog.

Por otro lado, tengo varios frentes personales que me quitan el sueño y no estoy en mi mejor momento de concentración. Ahora mismo lo único que quiero es que terminen las Navidades, acabar una obra que me ha pillado por medio y que las cosas se calmen un poco, no le pido más al 2023. Se va un año muy duro, sobre todo en lo personal, tanto, que estoy exhausta. Necesito un poco de normalidad.

No quería irme a descansar sin antes desearos una Feliz Navidad y un próspero Año Nuevo. Estaré de vuelta después de Reyes, espero que con las energías renovadas y las pilas cargadas. Recordad que para el que quiera, seguiré interactuando con vosotros a través de Instagram, Facebook o Twitter.

¡FELIZ NAVIDAD!

Imagenes: AD

Imágenes: Mi Casa Revista

Imágenes: El Mueble

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Un proyecto de Pia Capdevilla

Pienso que muchas de las casas que publico en el blog, aun siendo dignas merecedoras de estar en él por su belleza, quizás no sean del todo lo prácticas o realistas para la mayoría de los mortales. Obviamente si observas, te detienes a mirar bien las imágenes y lees el texto, siempre puedes sacar ideas. Por muy difícil que sea, que lo es, de vez en cuando creo que es necesario encontrar viviendas que se acerquen más a nuestras posibilidades, si no en tamaño (este es un chalet de 300 metros cuadrados), sí en el tipo de decoración aplicable a cualquier otra casa.

Salvando las particularidades de este proyecto, realizado por Pia Capdevila, que ha tenido en cuenta la estructura señorial de la vivienda y ha respetado la altura de los techos, las carpinterías, las molduras,… se puede decir que se trata de una vivienda muy familiar, donde se ha combinado el diseño contemporáneo con los toques rústicos-bohemios y de la que podemos sacar ideas.

De la entrada ya me ha enamorado la puerta acristalada que lo inunda todo de luz y la sencillez con la que se ha decorado la estancia. Un banco de fibras, una consola y una alfombra, sirven para llenar este espacio. Espacio que divide la casa en dos alas, a la izquierda dos habitaciones, la más pequeña dedicada a gimnasio (con la pared empapelada en ladrillo visto) y la otra, a sala de televisión con un baño anexo. A la derecha, encontramos la cocina, el salón-comedor con acceso al jardín y una casita de invitados.

Como os decía, al otro lado de la cristalera de entrada, está el gran salón con acceso al jardín. También tiene dos ambientes claramente diferenciados, no sólo el mobiliario delimita visualmente el salón del comedor, sino que también las características arquitectónicas como las diferentes alturas del techo, zonifican las distintas estancias, siendo el techo del salón más alto que el del comedor, donde se le ha dado protagonismo con un rosetón.

El mobiliario se ha elegido en tonos crudos y madera natural, potenciando aún más la luminosidad del espacio. Gracias a esa luz de la que disfruta el salón, se ha creado una zona de lectura con una butaca en cannage (que también podemos encontrarlo en otros muebles del comedor y del salón), una mesa auxiliar, un cuadro XL y un punto de luz.

Un chalet en el campo no sería tal sin un buen jardín con zona de comedor y de estar para los días de buen tiempo. En él, bajo el porche, se ha recurrido a las fibras naturales y la madera, que entre la vegetación y junto a los textiles, es un lugar que invita a pasar muchas horas.

Dentro, desde el comedor, accedemos a la cocina. Aunque el mobiliario parezca blanco no lo es, es un tono verde muy pálido que combina perfectamente con el papel elegido para el office de cuadros vichí en color tostado y los estores en el mismo tono. El encanto de la cocina lo tiene el pequeño office, de nuevo se sustituyen las sillas de un lado por un banco con tapa abatible que permite almacenar cosas y se combinan con otras dos sillas dándole dinamismo. La mesa redonda es todo un acierto, ocupa menos espacio y siempre es más agradable para comunicarse entre comensales.

Subiendo a la primera planta, encontramos los dormitorios. Lo primero que encontramos es la habitación principal con baño en suite, vestidor y salida a una terraza. Gracias a la altura de los techos se han podido permitir meter una cama de estructura metálica con dosel, punto focal indiscutible de la habitación. Gracias a su amplitud también, a los pies de la misma, se ha colocado un sofá tapizado y con los laterales de cannage (material que se repite en el piso de abajo), también en las mesillas de noche y en la lámpara del dormitorio.

El baño principal es sencillo, sin más pretensiones, con los mismos tonos del dormitorio. Predomina el blanco y se han colocado algunos accesorios en negro.

Me encanta el dormitorio infantil, es una mezcla muy acertada entre la arquitectura señorial del edificio y la estética contemporánea siguiendo el método Montessori con las literas a ras del suelo. Las lámparas simulan dos grandes nubes que cuelgan de un techo maravillosamente alto y quedan por encima de las literas, entre ambas y donde se apoyan, se diseñó un mueble a medida con capacidad de almacenaje y espacio para colocar cuatro pequeñas luces individuales. El baño infantil, es sencillo y pensado para ser utilizado por varios niños con compartimentos para guardar sus enseres de higiene.

Y por último, en la tercera planta, encontramos el despacho. Se ha dividido en dos partes, un espacio para leer con dos butacas y la pared vestida con estanterías y por el otro lado, un escritorio con hasta 4 puestos de trabajo. La habitación cuenta con mucha luz natural por lo que es perfecta para trabajar.

¿Qué os parece la casa? ¿No creéis que, aunque no todo el mundo viva en 300 metros cuadrados, sí tiene muchas ideas copiables? A mí particularmente, me resulta una vivienda muy familiar, cómoda y a pesar de sus metros, nada ostentosa. Espero que os guste y vuestros comentarios.

Imágenes: Jordi Canosa para Mi Casa Revista

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Estudio Bona Nit

Parece que el verano se me ha escapado entre los dedos, como cuando coges arena de la playa y la dejas caer, cae tan rápido que apenas está en tu mano unos segundos. Esa arena que tanto anhelaba y que no ha podido ser, al menos lo que tenía planeado. Pude ver el mar gracias a mis amigos que me regalaron por mi 50 cumpleaños una escapada a Suances, pero mi viaje a Portugal con mi mejor amiga no ha sido posible, las causas son dolorosas así que me las guardo por privacidad.

Aunque ahí afuera esté lloviendo y la sensación sea más otoñal que veraniega, aún nos quedan algunos días para cambiar de estación y prefiero que mi blog siga teniendo look de verano, de ahí la casa que os traigo hoy. Se sitúa en Formentera, es un proyecto de Olga Giménez, del estudio Bona Nit y la decoración es de la firma Let’s Pause.

Se trataba de un antiguo corral transformado en vivienda familiar, pero del que se ha conservado su origen y espíritu tradicional, sobre todo en cuanto a materiales. Paredes encaladas, piedra seca, las maderas, las fibras naturales,… y muchos espacios creados al aire libre para que la vivienda gire en torno a la naturaleza.

El porche te da la bienvenida con su colorido, el verde y el mostaza del marco de la puerta son protagonistas, que destacan gracias al blanco impoluto de las paredes. De dar calidez se encargan elementos como las vigas de madera del techo, los taburetes de hoja de palma o las pantallas de caña trenzadas a mano, todo de Let´s Pause. A continuación encontramos el comedor, muy informal y de estilo marcadamente mediterráneo. En madera, fibras y continuando con el esquema de resaltar las ventanas (esta vez en color azul). Patrón que volvemos a encontrar en la zona de porche y relax familiar.

Entrando en la vivienda, encontramos un recibidor sencillo pero muy impactante. Primero por esas grandes puertas azules y blancas con cuarterones de cristal, le acompaña la banqueta Ponza de Let´s Pause con elementos decorativos que proceden de Marruecos y Turquía. El tándem es perfecto. Desde la entrada pasamos al comedor, de estética mediterránea igualmente. Preside una mesa de madera con dos bancos y sobre ella la lámpara Barbaria que enfatiza más, si cabe, su aspecto rústico.

Junto al comedor, encontramos un sencillo cuarto de estar. Sobre el sofá, coloridos cojines de Bona Nit y como mesa de centro, el modelo Bajadilla realizado a mano y elaborado con madera de álamo. Se han añadido otros complementos como los taburetes, la escalera de madera natural Zahara, o una graciosa cabeza de toro de esparto para completar el conjunto.

En el dormitorio principal se mezclan piezas antiguas con actuales. Tenemos una bonita lámpara de araña que convive con sombreros de paja que adornan alegremente la pared del cabecero, al igual que coloridos textiles. En el dormitorio infantil, se aprovechó el espacio disponiendo literas en L y al otro lado de la habitación, se creó un espacio de almacenaje con un gran banco y cestas de fibras naturales que ayudan a mantener el orden.

Realmente me quedo con ganas de más en este «home tour», estoy convencida que el, o los baños, no me defraudarían, así como tampoco lo haría la cocina, pero no lo enseñan en el reportaje, así que ya puestos me los imagino a mi manera, me quedaría una casa monísima.

Recordad, aún nos quedan unos días de verano :-)

Imágenes Vía: Mi Casa Revista

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Apartamento de 50 m2

Como habréis visto la semana pasada no publiqué. Para los que no me seguís en redes, llevo con Covid desde el jueves pasado sin muchas ganas de nada, la verdad. El toro me ha pillado fuerte, sobre todo en lo que a los pulmones se refiere, con tanta tos quizás convalido todos los abdominales del mundo para la operación bikini ;-) es todo el ejercicio que he podido hacer, mejor dicho, es todo lo que he hecho en una semana. Menudo desperdicio de tiempo. Ahora tengo también a mi marido contagiado, hacemos un dúo de lo más interesante.

En casos como este, una se alegra de tener una casa grande donde poder repartir espacios para cada miembro de la familia o al menos, para los enfermos y los que no lo están. Mis hijas están en sus habitaciones con su propio baño y mi marido y yo, hemos conquistado el salón, el aseo y la cocina (vaya, la planta baja) y nuestros dominios de la planta de arriba. Parece que son las niñas las que están confinadas, no nosotros.

Por otro lado, vivir en estas casas grandes que requieren tanto mantenimiento, en situaciones como estas en las que no tienes ganas de hacer nada, también te da que pensar en lo confortable de los pisos más recogidos, con no demasiados metros cuadrados para poder limpiarlos en dos patadas. El que os voy a enseñar hoy me ha traído recuerdos de cuando vivía en mi primer apartamento de 45 metros cuadrados, lo tenía siempre como los chorros del oro. Claro que con familia, necesitaría alguna habitación más.

Este piso en San Petersburgo de 50 metros cuadrados, me ha llamado mucho la atención porque creo que tiene muy buenas soluciones de almacenaje, en todas y cada una de sus estancias. Se han utilizado los mismos colores como hilo conductor del apartamento, así, el terracota, el azul cielo y el verde, discurren por todas las estancias. El estudio de interiorismo Yuhome Design quiso transmitir por un lado el frescor del verano, en un sitio carente de sol la mayor parte del año, para ello utilizó los colores azul y verde o el bonito papel pintado de la cocina y el salón-comedor y por otro, cierta calidez con el terracota, en un lugar particularmente frío.

En las zonas comunes, el papel con motivos florales es el protagonista. El verde podemos verlo en las molduras del techo y el azul, en el sofá. Por todo el suelo (menos en la zona de la cocina), discurre un parquet de espiga que le da un aire distinguido al apartamento. El salón tenía una pequeña terraza que se cerró ganando una zona de lectura con un gran puf en un lado y un banco de almacenaje en el otro.

La cocina y comedor se separan de las estancias más privadas, gracias a un cerramiento de cristal con barrotillo en blanco. Me alegra que cada vez más, se vayan usando otros tipos de cerramiento que no sea el típico negro de corte industrial, ya que en realidad todos se pueden lacar en cualquier color y muchas veces quedan más elegantes y menos pesados visualmente en colores como el blanco, el beige, e incluso imitando a madera, por poner algunos ejemplos.

En el dormitorio volvemos a ver el mix de azul cielo (en el techo), los verdes (en textiles) y terracotas (en la mesilla de noche), todo ello rodeado por bonitas molduras en color blanco. En esta habitación se aprovechó también la parte baja de la ventana para crear un mueble a medida, un banco diseñado como rincón de lectura que se extiende a lo largo de la pared creando una estantería con partes abiertas y otras cerradas. Si os fijáis en el cuadro junto a dicho mueble, vemos que también sigue la misma gama cromática.

El vestidor era una de las necesidades de la propietaria, en esta casa no se ha escatimado en almacenamiento. De ahí llegamos al baño donde se repiten nuevamente los colores, unas paredes en terracota, azulejos en azul celeste y un mueble suspendido en verde, y se aprovechan todos los espacios para crear zonas de almacenaje. El inodoro al estar empotrado en la pared, crea una repisa donde poder dejar objetos decorativos y donde además, se aprovecha el retranqueo para poner el radiador de pared. Como veis los bidés pasaron a mejor vida, desde que existen las griferías que se instalan junto al inodoro y cumplen la misma función de lavado sin ocupar tanto espacio, es algo que se está instalando en casi todas las casas (ahora, hay que tener cuidado con su manejo o la presión del agua puede hacer que te jueguen una mala jugada y acabes mojando todo el baño :-)). Se ha aprovechado también para hacer un armario de suelo a techo junto al inodoro, desde luego no puede ser un espacio más completo.

Por cierto, que no he hablado de recibidor, pero para una casa de 50 metros cuadrados, es una buena carta de presentación. Cálido, amplio, con un generoso armario y espejos que multiplican tanto el espacio como la luz. En la entrada el suelo no es de madera sino cerámico, más fácil de mantener y limpiar para una zona con mayor tránsito. Un acierto.

¿Qué opináis de este piso tan coqueto? Yo de no ser por el Covid y que tengo dos adolescentes (necesito algo más de espacio), me cambiaba sin dudarlo. Tener casas grandes al final es muy esclavo, de verdad que está sobrevalorado.

Imágenes: Ivan Sorokin para Mi Casa Revista

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Piso en Chamberí

El post de hoy se lo dedico a mi mejor amiga. Ahora la tengo muy cerca, vive en el mismo pueblo que yo, pero su corazón siempre ha estado y estará en el barrio de Chamberí, barrio donde ha vivido con sus padres durante muchos años de su vida y del que se enamoró profundamente. No le quito razón en cuanto a que es una de las zonas con más alma de Madrid, donde conviven pisos señoriales con otros más humildes, mucho comercio del de «toda la vida» con otros nuevos creados con la revalorización del barrio, anchas avenidas que dan lugar a pequeñas callejuelas llenas de encanto, con todo tipo de servicios. Y lo que es más importante, una zona que a pesar de la vida que tiene y estar en el centro de Madrid, al caer la noche se vuelve silenciosa y te invita al descanso. Desde luego si te lo puedes permitir, es uno de los mejores barrios para vivir, Ana sigue soñando con que algún día volverá a Chamberí.

La vivienda que os traigo hoy fue un flechazo para los propietarios. Se enamoraron de sus altos techos (típico de la zona), sus grandes ventanales que lo inundaban todo de luz, su distribución que ya tenía una obra reciente y habían dejado los espacios abiertos. Para el interiorismo contrataron al Estudio Backsteen que enseguida, supo captar la idea del cliente.

Querían una casa desenfadada, sin demasiados formalismos. El interiorista les propuso crear un «oasis dentro de la ciudad» como hilo conductor, meter toques exóticos, verdes, plantas, fibras naturales,… la idea gustó y ya desde la entrada se puede plasmado el concepto. Se optó por un mural en blanco y negro, de Rebel Walls, con el fin de no meter color en la pared y poder combinarlo más fácilmente con todo. Siguiendo con la idea de lo exótico, se puso una planta de gran formato que, además, tiene la función de obstaculizar la vista al salón para conseguir cierta intimidad. El banco que completa el recibidor es de Nordal y las lámparas, de Miv Interiores.

Para la zona de estar del salón, querían colores y materiales amables, mezclar pero buscando el equilibrio, de ahí que encontremos verdes, fibras y latón. El sofá y las mesas de centro son de The Sofa Company, los cojines de Zara Home y Nordal, la mesa auxiliar en esquina de Le Petit Florilège, las lámparas de fibras son de La Redoute y la de cristal, de Petite Lily. La colorida alfombra que unifica el conjunto, es de Kilombo Home.

Desde la zona de estar se puede ver toda la planta abierta, el comedor y la cocina. Una distribución óptima para aquellos, que como los propietarios, les gusta cocinar, recibir amigos, etc. y estar presente en las conversaciones. En cuanto he visto el comedor, sabía que las sillas eran de Calma Chechu, son únicas e inconfundibles. Se han tapizado con terciopelo de Güell Lamadrid y las de la cabecera, con tela de motivos tropicales de la misma firma. La mesa es de Tabolo (no me convence mucho la verdad, no sé si me falta sobre, o me sobran patas, es una cuestión de proporción no de diseño, pero vaya que es mi opinión). La lámpara la encontramos en Thai Natura.

El dormitorio lo percibimos como un espacio vestido, lleno de texturas. Tonalidades grises, blancas y cremas que lo que lo convierten en un refugio, al que complementaron con arte, de la plataforma Programa Taide. La ropa de cama al igual que la del baño es de Zara Home, lavabo de Roca.

¿Qué os ha parecido este oasis en medio de la ciudad? Sin duda, la situación es completamente envidiable, la luz y la distribución también y de la decoración, creo que pocas cosas cambiaría.

Imágenes: Nuria Serrano para Mi Casa Revista

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Diferente, genuina y original…

Todavía sigo en un momento en el que hablar de Navidad, es algo pronto para mí. Sé que ya se ha desatado la locura por todas partes, pero creo que hasta diciembre por aquí no veréis el ambiente festivo. Lo que posiblemente haga la semana que viene, es una recopilación de buenas ofertas para el Black Friday, otro bombardeo del que nadie se escapa pero que al menos, nos hace ahorrar algo de cara a las fiestas.

Pues lo dicho, que en la casa que traigo hoy encontraréis mucha inspiración, pero nada que tenga que ver con la Navidad.

Se trata de un proyecto de reforma integral del equipo de arquitectos de Space Factory, en Asnières-sur-Seine, Francia. Una casa de obreros del siglo XX, transformada en una auténtica y original obra de arte. Lo llamaron «The Hidden Palace» (El palacio escondido) porque fue así como lo imaginaron e intentaron recrear mediante su interiorismo.

La casa está llena de detalles para comentar. Preciosa la cocina donde predominan los colores pastel, el azul grisáceo de los muebles combinado con encimeras de mármol y pequeños toques dorados (como en la grifería o los tiradores), acompañan al suelo de mosaico, que completa el conjunto. Los guiños de madera (como las tablas de cortar o los utensilios de cocina), tienen su réplica en el office, sin duda uno de los espacios más originales de toda la casa. Está inspirado en los clásicos dinners americanos con estética de los 50´. Un gran banco en forma de «U» de terciopelo rosa, acoge la mesa redonda que combina madera y mármol en su base dibujando formas geométricas. Remata el conjunto, una lámpara con forma de pétalo que ilumina el comedor.

Zócalos a media altura y un verde intenso recorren parte de la vivienda, decorando sí, pero cuando los espacio son largos y estrechos, mediante esta técnica conseguimos disminuir la sensación de tubo en pasillos largos como en este caso, o en entradas pequeñas (como la de esta vivienda también), generando interés en esa pequeña estancia. Aquí, podemos ver cómo en la entrada se ha colocado sencillamente un espejo, el zócalo pintado y un suelo hidráulico que enmarca el espacio diferenciándolo del resto.

Las formas curvas están también presentes en todas las estancias, desde el salón donde se realizaron ventanales acabados en arco que lo comunican con la cocina, a los propios muebles como los del office, o la mesita redonda frente al sofá, las mismas curvas de la escalera, y más claramente al llegar al dormitorio principal donde sobre la cama, se ha construido una hornacina a modo de cabecero y se ha pintado de un azul intenso para resaltar. Finalmente el baño principal, también cuenta con sinuosas formas curvas, pero aquí ya estamos ante otro cantar.

Junto con la cocina, mi espacio favorito de la casa, ha sido amor a primera vista. La bañera vintage con patas es la protagonista y queda especialmente bien con esos azulejos tipo rústicos de 10*10 de la pared. Para el suelo se ha elegido los mismos de la cocina, de tipo mosaico. El hecho de que el baño esté abuhardillado y que en la parte del lavabo se hayan incorporado toques dorados, fibras naturales y colores más cálidos, lo hace todavía más confortable.

No sé qué pensaréis de esta casa pero yo la veo diferente, genuina y original,… me fascina su personalidad.

Fotografía: Hervé Goluza para Mi Casa Revista

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StudioLARQ

La vivienda que traigo hoy se la dedico a unos clientes para los que estamos reformando y decorando su piso. Al verla he pensado que les ayudaría a visualizar lo que tengo en mente para ellos, en cuanto a decoración se refiere.

Vienen de un chalet y se cambian a un piso, obviamente no todo lo que tienen se lo pueden llevar, pero sí muchas piezas a las que les tienen un cariño especial y que además, les permitirá recordar sus vivencias. Por otro lado, como es lógico, también les apetece estrenar, están en el comienzo de una nueva etapa de su vida y a partir de ahora, crearán nuevos recuerdos. Así que aquí viene el reto más difícil y bonito a la vez, conjugar su pasado con nuevas adquisiciones, intentando que el conjunto se vea bonito.

Esto es lo que tiene la casa que os traigo hoy, proyecto de StudioLARQ, lo curioso es que hay piezas que me recuerdan a las que tienen ellos, o a las que yo misma les he recomendado (como la mesa del comedor, un clásico renovado que va perfecto con su estilo). Espero que este post, les ayude a hacerse a la idea de lo que tengo en mente para ellos.

Esta casa está dividida en dos, la zona de día con orientación sur y que comparte cocina, salón y comedor y por otro lado, el área privada que disfruta de un amplio patio trasero. A todo ello se le ha dado continuidad gracias al suelo de microcemento que recorre toda la casa.

No me puede gustar más la librería que comparte zona con el comedor. Me parece una pena que cada vez se tienda más a hacer muebles minimalistas en salones para albergar la zona de televisión en detrimento de este tipo de librerías que pueden cumplir además, la función de albergar la tele. Ya sabéis que para mí una casa sin libros ni arte, pierde mucha alma.

La zona de estar se ha resuelto en «U» gracias a dos grandes sofás de cuero y dos butacas de estilo nórdico, en el centro, una mesa de nogal completa el espacio.

Y llegamos a la joya de la corona, una gran cocina con isla que se puede integrar o no en el salón a voluntad, gracias al cerramiento de cristal. Me parece un acierto los tonos elegidos para la misma, madera en la parte baja y un beige en los armarios altos, así como el tono claro de las encimeras y los frentes de Silestone – también beige claro – que contrarrestan la frialdad y el carácter industrial que le da el cerramiento o el suelo de microcemento. La cocina conecta con un pequeño y sencillo lavadero.

Del distribuidor, donde encontramos como elemento decorativo una máquina de escribir Olivetti Lettera 35, se accede a los dormitorios. Es en el principal donde he vuelto a recordar a mis clientes al ver el cabecero, la cómoda, las lámparas,… todo antiguo, e incluso los cuadros que están pintados por los dueños, como será el caso de nuestro proyecto, ella es una gran pintora y por tanto sus obras lucirán por toda la casa.

La habitación tiene acceso al baño en suite, que siguió el modelo del resto de la vivienda. Suelo de microcemento, un gran mueble para el lavabo de estilo retro y baldosas de 20*20 con lechada en gris oscuro para enfatizar más si cabe, el espíritu vintage de toda la casa.

¿Qué os parece la mezcla de lo nuevo y lo antiguo en esta vivienda? Para mí sin duda, es todo un acierto.

Imágenes: StudioLARQ / Mi Casa Revista

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Un proyecto de LaiaUbia Studio

La casa que os traigo hoy es un claro ejemplo del «menos es más«, así decidió la interiorista catalana LaiaUbia Studio que se enfrentaría a este proyecto de rehabilitación de una vivienda de 120 metros cuadrados con un gran patio trasero. Porque precisamente lo que había que destacar era su continente, no tanto el contenido, de ahí que las piezas de decoración sean pocas aunque bien elegidas. La obra fue completamente respetuosa con los materiales existentes dando énfasis y potenciando todo aquello que le daba personalidad o sacaba a relucir la historia de esta vivienda unifamiliar.

Al abrir espacios y crear lucernarios tanto en la escalera como en la cocina, la luz lo invade todo. En la planta baja desde que accedes a la casa puedes ver al final el patio, también encontramos la sala de estar, la cocina, el baño y un estudio. En el pasillo, para ahorrar espacio se han utilizado las antiguas puertas poniéndolas correderas, alimentando el carácter de la vivienda con las paredes de ladrillo, instalaciones y viguería vista. Para el suelo se puso hormigón fratasado (parecido al hormigón impreso pero algo más rugoso y con cierta textura que lo hace si cabe, más resistente y antideslizante).

La cocina se hizo a medida para aprovechar la altura de la misma. Combina muebles lacados en blanco con otros en madera de roble natural. Para aligerar un poco el frente, se pusieron algunos estantes abiertos. Sinceramente me encanta la combinación, aunque le veo un «pero», a no ser que seas jugador de baloncesto necesitas una escalera para coger algo de los muebles superiores de madera (ahora, almacenaje tienes para aburrir).

La cocina tiene también su comedor con mesa de madera y sillas metálicas. Se abre gracias a un cerramiento a un gran patio, preparado para montar una zona de estar, o bien para hacer barbacoas o lo que cada uno quiera imaginar, porque es bien grande. La zona del patio pegada a la casa continua con el mismo suelo, ya que al ser hormigón es apto tanto para interior como exterior y al fondo, vemos la zona ajardinada.

En esta misma planta, encontramos un elegante baño con pared de pizarra, un espejo dorado estilo imperio y accesorios en negro de la firma Cosmic.

Subiendo la escalera se encuentra el lugar más curioso de la casa, este espacio multifuncional es una idea para tomar nota. ¿Quién diría que abriendo esas puertas encontramos en un lado un lavadero a medida y en el otro una zona de estudio? La malla además de servir como seguridad para la escalera (por cierto de forma muy estética y dejando pasar la luz), en un momento dado también te permite colgar ropa a secar ¿No os parece una idea genial?

El dormitorio principal como decía al principio, está amueblado de manera muy sencilla para dar prioridad a los elementos arquitectónicos, como la conservación de los techos originales. Se ha vestido en tonos tierras, naturales y se ha puesto un suelo más acogedor que el de la planta baja, en este caso es un laminado de la firma Egger. Los textiles son de Maison du Monde.

La habitación infantil sí que es minimalismo puro, típica litera de Ikea con espacio inferior para jugar, una hamaca y como zona de almacenaje una gran bolsa de papel tipo Le Sac en Papier. También se le ha dado el protagonismo al techo. Una manera como en este caso de disimular la gran altura de los techos si no disponemos de muchos muebles, es engañar al ojo con pintura, como en este caso que se ha pintado un zócalo en la habitación a media altura.

Por último del baño de esta planta, destaco los azulejos hidráulicos hexagonales de Mosaico del Sur, combinado con el mobiliario de madera hecho a medida y el tono elegido, me resulta muy relajante.

Os dejo ya pero no sin antes felicitar a todas las mamás y desearos un feliz puente. ¡Descansad!

Imágenes: Mi Casa Revista / LaiaUbia Studio

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Un mix cargado de personalidad

«Rodéate de objetos que tengan sentido, tu casa contiene tu historia», con esta frase de Calma Chechu me despertaba hoy, y no puedo estar más de acuerdo. Quizás no os lo he dicho con estas mismas palabras, pero una y otra vez es lo que intento transmitir en el blog. No intentemos hacer casas, réplicas de lo que vemos en Instagram o en redes, sencillamente cojamos ideas que comulguen con nuestra filosofía, hagámoslas nuestras y creemos hogares, sólo así cuando crucemos el umbral de nuestra puerta, nos sentiremos arropados y orgullos de lo conseguido, y no viviendo en un lugar que quizás sea bonito o incluso de revista, pero donde no sintamos apego.

En cuando vi esta casa quise conocer más, tan sólo el recibidor ya habla de sus propietarios. No necesito leer un artículo para saber que quien sea que vive en ella, son personas que no temen expresarse y dar rienda suelta a su imaginación. No, no se han buscado la típica consola para la entrada, sino un banco antiguo desvencijado, con el color desconchado por el paso del tiempo. Y lo han mezclado con unos originales cojines, que aunque el artículo no dice de dónde son, bien podrían proceder de la tienda de María de Alfombras Étnicas, que los tiene, si no iguales, muy parecidos. Y esto sólo es la entrada, pasad a ver el resto que es un derroche de personalidad.

En el salón, por favor haced un alto en camino en la mesa de despacho, es heredada, de los años 40, y se ha mezclado con piezas modernas de aire mid-century. El aplique es de TiendasOn, la silla de Sklum y la famosa lámina de jirafa, de Desenio. Un combo atrevido y muy personal. De la misma manera, en la zona de lectura, se ha mezclado una butaca nórdica, de Northdeco, con una consola, regalo de la prima de la propietaria, que pertenecía a un palacete ¿Cómo os quedáis? Yo personalmente me quito el sombrero. Si os fijáis también, en el comedor las sillas son distintas, porque ¿para qué repetir? qué aburrimiento ¿no? ;-)

El salón comedor se comunica a través de un gran ventanal con la sala de juegos. Allí muchas de sus piezas también son auténticas joyas. Como la pequeña mesa, que era de la abuela y resulta que siempre la tenía tapada con un mantel. ¡Qué sacrilegio! La propietaria decidió cambiársela por una sencilla, que total para que la tape… Las sillas también son preciosas, son escolares de www.mobiliario-escolar.com y la colorida lámpara tipo Sputnik es de Liderlamp.

Me voy a la cocina y no puedo evitar que mis ojos se queden clavados en el aparador verde, que además queda enmarcado por el papel pintado (de depapelpintado.es). En este espacio donde todo es tan aséptico, con muebles, encimera e isla en color blanco, unas notas discordantes vienen genial al conjunto. Así que empezando por el mueble, que además hace contraste entre lo nuevo y lo antiguo, y piezas en distintos colores o texturas, como el taburete amarillo, los de fibra, o las lámparas,… son elementos que aportan el contrapunto y la personalidad.

El dormitorio es sencillo pero muy acogedor, prescindir de cabecero no tiene por qué quedar aburrido, menos aún cuando lo sustituyes por unas molduras que enmarcan la cama. De nuevo el punto de color lo ponen los precisos cojines.

Del dormitorio infantil, lo que más gracia me ha hecho es encontrarme con la cabeza de león de Ila y Ela, una empresa artesana española sobre la que ya os escribí en 2018, podéis recordar el post aquí.

Por último el baño, un mueble en madera y hierro de corte industrial de Cota Interiorismo, se ha adaptado al espacio, a él se le ha acoplado una encimera de Neolith, un sobre lavabo y una grifería negra de Amazon. Una pieza que a priori no tiene por qué estar destinada a un baño, con un poco de imaginación puede dar el mismo servicio que otro hecho para esa finalidad, y con la seguridad que nadie tendrá uno igual en su casa :-) ¿Te atreves a ser original?

El proyecto de decoración y reforma de esta preciosa vivienda es de la arquitecta María José Navarro Segura de Nasezen. Podéis ver el reportaje completo en este artículo de Mi Casa Revista.

Fuente: Mi Casa Revista /  Fotografía: Carolina F. Varela

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Rocio Esquilas

Si no me equivoco, Rocío Esquilas es una de las primeras interioristas a las que empecé a seguir cuando me abrí mi cuenta de Instagram. Me gusta aprender y empaparme de profesionales que, teniendo ciertos puntos en común conmigo, van mucho más allá y me demuestran que el atrevimiento y el riesgo también son buenos, siempre que se hagan con gusto, claro :-)

Había leído en sus redes que le habían publicado su último trabajo en la revista Mi Casa y tenía que compartir, presentía que me gustaría. Como veréis el color es el protagonista tanto en el mobiliario, como en los papeles pintados, en revestimientos,… nada se salva, excepto la habitación infantil donde predominan los neutros.

Los propietarios encontraron esta vivienda en la zona de Mirasierra (Madrid) y encargaron la reforma al estudio de interiorismo de Rocío Esquilas. La rehabilitación fue integral y duró cuatro meses, justo antes de que naciera el bebé que la pareja estaba esperando y motivo del cambio de vivienda. De cuatro dormitorios pasaron a tres, uno de ellos aloja ahora el comedor; se rehicieron los dos baños pero también se sacó un aseo de servicio.

Se mezclaron piezas antiguas y nuevas, como la mesa tocinera del salón que tiene unos 80 años y sobre ella luce una besuguera de cobre comprada en un mercadillo y que utilizan a modo de jarrón. Cerrando el conjunto, dos sillones de fibra de Ikea y otro tapizado de cannage de Westwing; bajo la mesa, alfombra de Zara Home. La preciosa lámpara que hay a la vera del sofá de Ormos, es de Detana (firma de la que ya os he hablado en más de una ocasión). Otro ejemplo es la cómoda con tiradores de concha, comprada en el Rastro madrileño.

Si pasamos al comedor, vemos que asoma un cerramiento de madera lacada en negro y cristal. Sencillamente se derribó la pared de la entrada y se sustituyó por este elemento para dejar pasar la luz. El resto de luminosidad y alegría en este espacio lo ponen el papel pintado de Cole&Son y el mobiliario. Las lámparas son del Taller de las Indias, la mesa de Kave Home, plantas y macetas de Colvin, y sillas de LDK Garden.

La cocina se realizó a medida para acoger la colección de vajillas, cristalerías, mantelerías, etc. de los propietarios, por lo que se le dio mucha importancia al almacenamiento. Se creó también una pequeña isla central que sirviera para disimular un pilar de carga, con una barra en madera de roble (ya se sabe, si no puedes con el enemigo, únete a él). Se optó por no poner armarios en la parte superior, el protagonismo se lo lleva el salpicadero de azulejos con forma de escamas de Discesur en tono turquesa, que recorre el frontal de la pared. Me encanta cómo aquí se ha separado el azulejo de la zona de pintura con un listón de madera de roble, réplica de la barra de la isla.

El dormitorio infantil es el más sosegado de la casa, lo que más me gusta es el moisés; es clavadito al de mi hermana y mío que luego han utilizado mis hijas y que ahora reposa en mi garaje bien envuelto a la espera de que mis futuros nietos vuelvan a darle uso :-) (Dentro de muchos años espero, que aún soy muy joven). El de la imagen es de la tienda Mimitos Home, una firma de productos artesanales para bebés, el mío es original de los años 70 y sigue como nuevo. El papel pintado se puede adquirir en Deco&Kids, la alfombra es de Ikea y lámpara de El Corte Inglés. Rocío Esquilas no ha querido escatimar en originalidad y diversión ni en el cuarto de baño; en el infantil lucen unos pingüinos que lo dotan de personalidad, se trata del papel «Emperor Blue», de Andrew Martin.

La idea de la balda vuelve a repetirse en el dormitorio principal, aquí hace las veces de cabecero y sirve para apoyar láminas y cuadros. El gran ventilador del techo es de Faro Barcelona, la mesilla de noche de Adaleya y la lámpara de Borgia Conti.

El baño principal también es un derroche de creatividad, de nuevo el protagonista es el mural «Find Parrots» de Lara Costafreda para Coordonné. El armario, que era propiedad de los dueños, se pintó a tono con el papel de la pared y en lugar de toallero, se optó por una escalera de bambú de Leroy Merlin. El mueble bajo lavabo fue un diseño de la dueña que Rocío pidió realizar a medida. El espejo dorado es de Zara Home.

Os dejo que disfrutéis de la casa y toméis nota de este mix tan bien avenido, lleno de color pero atemporal. ¡Un proyecto sobresaliente!

Vía: Mi Casa Revista / Fotografía: Miriam Yeleq

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