Casa Gràcia

Esta semana nos vamos a Barcelona a conocer la reforma integral de una casa modernista construida en 1902 y actualiza por Veronica Mimoun Studio. Nos encontramos ante una vivienda de tres plantas de nada más y nada menos 600 metros cuadrados, construida sobre una parcela de 1.000, donde los patios y jardines hacen una gran labor de respiro, para una casa que se sitúa en pleno corazón de la ciudad condal.

En todo momento se quiso conservar la esencia de la vivienda, con sus elementos originales, incluso se encontraron nuevas zonas durante la demolición, como un sótano que podría remontarse a la época de la Guerra Civil. Para empezar, se demolió completamente el interior y se crearon espacios más funcionales, pero para no perder su esencia ni la sensación de calma, se rediseñaron los arcos del salón, se eligieron cálidos tonos tierra en las paredes, se ampliaron las ventanas a su estado original, así como se hizo un nuevo diseño para el bonito jardín.

La naturaleza cuenta un con un papel importante en esta casa por lo que los materiales se eligieron de origen natural. Suelos de madera, encimera de granito para la cocina, baldosas de barro para el exterior, azulejos de gran formato para los baños calculando bien para generar los mínimos desechos, todo con la finalidad de reducir así, el impacto medio ambiental. Muchos de los muebles también son piezas restauradas para conseguir este mismo fin.

La casa tiene como eje una escalera inspirada en las obras de Gaudí, sus curvas nos llevan a una primera planta donde se distribuyen el dormitorio principal con vestidor y baño, los dormitorios infantiles y la habitación de invitados. En la planta principal, los grandes arcos separan sutilmente la zona de estar del comedor, aunque todo está visualmente conectado, el nexo de unión y centro neurálgico de la casa es la cocina con península. Los grandes ventanales dan paso al jardín, que se puede ver desde cualquier rincón de la casa. En la parte trasera, un camino pavimentado lleva a una zona donde antiguamente se encontraban los establos, y que ahora ha sido rehabilitado como estudio y casita para invitados.

Un oasis en el centro de Barcelona donde su mayor tesoro sin duda, es su enorme jardín donde evadirse de la ruidosa y ajetreada vida de la urbe.

Imágenes: Montse Garriga para revista AD

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Mediterráneamente hablando…

Que levante la mano quién a estas alturas de la película no está con necesidad de desconexión y vacaciones. Algunos ya estarán disfrutando pero tengo claro que no viven en Madrid :-) ¿Qué está pasando con el tráfico de esta ciudad? Si os digo que llevo una semana con una media de 4 horas al volante cada día, ¿me creéis? Os prometo que, si tenéis que coger la A1, la M40 y la A6 cada día, eso es lo que vais a encontrar, obras, coches y atascos en todas partes, ¡qué llegue agosto ya, por favor!

De ahí que siga con casas de verano que, sinceramente es lo más apetecible de ver. Esta se encuentra a las afueras de Barcelona y pertenece a la empresaria de la firma de ropa para embarazadas Paramamá, Julieta Planas. No recurrió a ningún profesional para su decoración, Instagram y Pinterest fueron su inspiración. Por otro lado, los anteriores propietarios ya habían hecho la rehabilitación de esta vivienda que data de 1870, así que dejaron un lienzo en blanco para que Julieta y su marido sólo tuvieran que dar rienda suelta a su imaginación con la deco.

Los colores predominantes son el blanco y el azul, muy asociados al estilo mediterráneo, con toques rústicos en la decoración que compensan la frialdad de los tonos e introducen la calidez mediante las maderas y las fibras naturales. Esta combinación es un acierto seguro para quienes quieran conseguir una casa que transmita esa sensación refrescante y veraniega.

El porche se ha dividido en varias zonas, estar, comedor y un espacio de cocina exterior. La enorme alfombra de fibras de la zona de estar es de Sacum, así como los bajoplatos del comedor, la vajilla de Costa Nova y las copas de Zara Home. Las bonitas butacas son del Taller de Las Indias.

En la entrada ya se aprecia lo que vendrá después, espacios abiertos y despejados, con los muebles justos (sin llegar al minimalismo) y cierto aire orgánico, natural e incluso rústico. Espacios que transmiten paz. El mueble del recibidor es de Malana’s Workshoplo acompaña una gran lámpara de techo de Ay Illuminate, en La Maison.

La madera tiene un gran protagonismo, desde el suelo (en su formato de lamas anchas de roble), pasando por la cocina e incluso los baños. Muchos de los muebles también, son piezas antiguas que se han repartido por las distintas estancias de la casa, como la mesa de comedor adquirida en Mercantic. Las sillas son de Westwing y las lámparas de Catalina House.

En el salón, la propietaria se decantó por un fresco lino blanco en los sofás, que son de Maison du Monde, acompañado de cojines en tonos azules de La Maison y otros de rayas de Sira Barcelona. Para contrastar con el blanco que predomina en la estancia, se colocó una mesa de centro de madera que le da calidez, es del Taller de Las Indias.

Y llegamos a la habitación que más me gusta: la infantil, aunque realmente no tiene nada de infantil, pero está reservada a las pequeñas de la casa. Las carpinterías y viguería original de la casa se mantuvieron y se pintaron de blanco como el resto, así mantiene su carácter arquitectónico a la vez que queda integrado en el resto de la casa. La decoración como veis es muy sencilla, dos grandes camas vestidas con fundas nórdicas de La Redoute, se complementan con dos alfombras a pie de cama, plaid y cojín sobre la silla Acapulco de Zara Home. La estantería y las cestas son de Sacum.

El dormitorio principal mantiene el mismo estilo decorativo, con funda nórdica y cuadrantes de Filocolore, los cojines son de La Maison y Sira Barcelona. A los pies de la cama, banqueta de fibras de Tine K Home y escritorio de herencia. En esta habitación también se puede apreciar los elementos modernistas en las vidrieras de las ventanas que la propietaria decidió mantener y que además, le dan carácter al dormitorio. Detalles también como las baldosas de la escalera que datan de 1870, casualmente en blanco y azul, son toques diferenciadores que elevan la vivienda de categoría y la hacen más especial.

¿Qué os parece la casa? ¿No os resulta apetecible para el verano?…

Fotografía: Stella Rotger para El Mueble / Estilismo: Olga Gil-Vernet

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Desert Palisades Guardhouse

Sólo he necesitado un par de días otoñales para desear que vuelva el calor, qué rarita soy ¿verdad? Es que con el frío me encojo (cualquiera diría que estoy en los huesos, todo lo contario, pero mi grasa es inservible como abrigo :-)) y la lluvia me pone triste y melancólica, así que yo ya he tenido suficiente frío por el momento y he decidido llevaros virtualmente al desierto, así de radical. No es un desierto cualquiera, nos vamos a California, tierra por la que siento mucho cariño desde que estuve un año viviendo allí con una familia maravillosa.

Seguro que cuando veáis las imágenes el post os vais a quedar con ganas de ver más estancias, como me ha pasado a mí, porque ¿dónde está la cocina? ¿y los dormitorios? no aparecen por ningún lado, pero la realidad es que en este proyecto cuenta más el exterior que el interior.

Desert Palisades Guardhouse es un trabajo realizado por el estudio de arquitectura La vivienda está situada en las laderas escarpadas de Chino Canyon, en el valle de Coachella, a pocos kilómetros de Palm Springs. El enclave privilegiado de Desert Palisades ofrece modernas residencias que se asoman a las impresionantes vistas del desierto que las rodea.

El proyecto está concebido para crear un diálogo fluido entre naturaleza y construcción. De ahí que en su estructura predomine el acero corten, cuyo color terroso se confunde con el entorno, al igual que la geometría del voladizo de 10 metros que destaca entre las formas orgánicas del paisaje desértico. Dicho voladizo queda suspendido sobre una enorme roca independiente, sin llegar a tocarla, como si flotara sobre ella, con el propósito de generar una tensión entre ambas estructuras (lo natural y lo artificial). A su alrededor, muchas otras piedras y rocas de distintos tamaños, así como una amplia gama de flora desértica, enmarcan el edificio de acero. Los acabados exteriores incluyen además cemento y madera, elegidos junto al acero por su durabilidad, atemporalidad y minimalismo, de tal manera que no interfirieran con el entorno.

Para el interior se optó por una paleta de mediados de siglo que evoca al modernismo, corriente que floreció en Palm Springs en los años 40 y 50. Dentro, encontramos acabados más pulidos con el fin de proporcionar calidez, pero los materiales y el criterio son los mismos que en el exterior, la finalidad siempre es mantener la conexión con el paisaje. A pesar del abrasador calor del desierto y de los grandes ventanales de suelo a techo, la casa disfruta de grandes zonas de sombra gracias al voladizo (obviamente el aire acondicionado es necesario también). En el salón podemos encontrar piezas icónicas como la mesa de Isamu Noguchi o una composición de luminarias de Tom Dixon. Llegados al baño es donde me quedo con ganas de más, la elegancia de la madera y el negro dominante, me pierde…

¡Feliz fin de semana!

Vía: Yatzer y Studio ARD

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La casa de la decoradora Estrella Salietti

Barcelona es una ciudad que siempre ha llamado mi atención, sobre todo por su arquitectura modernista. Si os dieran a elegir entre obra nueva en Barcelona o una casa de mediados del siglo pasado con todo el carácter que eso conlleva ¿con cuál os quedaríais? Yo lo tengo bastante claro, aunque si se trata de buscar casa en la ciudad condal no será por inmobiliarias en Barcelona, hay para todos los gustos.

Esto mismo le pasó a la conocida, aunque algo excéntrica, decoradora Estrella Salietti, se dejó seducir por unas vidrieras modernistas. Tras vivir primero en un ático de 600 metros cuadrados en la calle Balmes, pasó a una torre estilo british en Angel Guimerà, de ahí a un garaje estilo neoyorquino y por fin a este piso situado en un edificio de los años 30, de ochenta metros cuadrados más cien de terraza al que ha llamado «La Barraquita».

Para su rehabilitación se tiraron todos los tabiques abriendo estancias y comunicándolas entre sí. Todas las carpinterías se pintaron de blanco para aportar más luz, ya que en su estado original eran oscuras. Tanto la pintura de la vivienda como sus suelos de parquet en zig-zag y baldosa hidráulica marcan su personalidad. Pero lo más impactante son las frases impresas en vinilo que recorren las paredes de la casa, pertenecen a escritores, periodistas o amigos de Estrella Saletti.

A la tranquila paleta tranquila que predomina en el ambiente, tonos azules, blancos y grises, la decoradora introdujo muebles excéntricos y divertidos, algunos hechos por ella misma, poniendo así el punto de contraste. El conjunto es una vivienda ecléctica, llena de mezclas, donde los terciopelos, los plásticos y las antigüedades son capaces de convivir a la perfección. Su finalidad era conseguir una casa a lo «Agatha Christie» personal y muy suya.

Ya desde la entrada (primera imagen) se intuye lo que vendrá después, el colorido, el suelo en zig-zag o las famosas frases en vinilo que inundan las paredes.

Seguimos por el salón con ese precioso sofá amarillo de formas redondeadas en terciopelo de Gastón y Daniela,

La tercera imagen corresponde a la biblioteca, en ella volvemos a encontrar mezclas de estilos y texturas, un banco del siglo XIX, junto a la banqueta redonda y la alfombra (ambas de Basarabian). La lámpara pertenece a Azul Tierra.

Seguimos por el office donde se han combinado unas sillas Panton junto a una mesa inglesa bajo la luminaria de FM Lighting. Detrás se aprecian las distintas cristalerías llenas de colorido.

El comedor es sin duda para mí uno de los espacios más bonitos, enmarcado por la gran cristalera modernista, se ha jugado a poner tres pequeñas mesas separadas diseñadas por la decoradora que dan más juego en caso de necesidad que una mesa tradicional alargada, por un lado un sofá corrido con tela de James Malone y por el otro, más sillas Panton, las alfombras son de Basarabian y los jarrones de Objeto de Deseo.

Respecto a la cocina, que está a continuación, tengo mis dudas sobre las celosías de la isla y el techo, la verdad es que no me van demasiado, el suelo es un hidráulico de Tiles & Wood.

La terraza sí me parece un gran escape para estar en el centro de la ciudad, fue realizada con ayuda de Jardinería la Font. En cuanto al mobiliario exterior tanto los bancos como la mesa pertenecen a Azul Tierra, las sillas verdes son de los Bouroullec para Vitra y el famoso Perrito Puppy de Eero Aarnio para Magis.

Por fin en el dormitorio se respira algo más de tranquilidad, las paredes están enteladas con terciopelo de Gastón y Daniela, la banqueta tapizada con tela de Designers Guild y las mesillas son De Padova. Y por último el baño, donde encontramos de nuevo otra banqueta antigua rodeada de más color.

Esta casa enamora o la aborreces, pero no deja indiferente ¿no os parece?

¡Feliz fin de semana!

Fuente: Revista AD

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Intangibles Art

Cada día me impresiono más de las cosas que encuentro en la red. Si tengo que calificar esta tienda, Intangibles Art, diría que es de lo más curioso que he visto nunca. La decoración, las artes y las letras juntas en un mismo espacio. Arte contemporáneo con una amplia muestra de grabados, litografías, pintura y escultura, cerámica, fotografía y joyería de autor. En otro apartado la venta se enfoca a las antigüedades del Siglo XX (Art Nouveau, Modernismo, Art Deco, Bauhaus, Años 50) mobiliario, decoración, iluminación, baquelita, cerámica, cristal, complementos y libros sobre esta temática. Y por último una gran selección de libros, que abarcan multitud de campos.

Viendo las fotos del post, os haréis una idea de lo que podréis encontrar, aunque lo mejor son las descripciones de la web que explican al detalle la procedencia de cada producto, fechas, autor, y todas sus características. Y desde luego lo gracioso está en la disparidad, te encuentras por ejemplo una lavadora de aluminio de los años 50 (cuarta foto), junto a preciosas esculturas y litografías, que nada tienen que ver. Ah! la compra se hace online y los precios están muy bien (como es obvio la pintura y escultura son algo más caros, pero como en el mercado en general).

Además si no encuentras lo que buscas, ellos lo hacen por ti. En las últimas fotografías podéis ver los encargos que han hecho clientes y de los que seguro, ahora estarán disfrutando. Se trata de la escultura DAKON en bronce y marfil, de una lámpara Art Decó de Austria 1920, un puntero YAD / TORAH en plata de 1894, una lámpara JUMBO original y la lámpara MAX LE VERRIER.

Intangibles ART

Intangibles ART

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